POZNAN.- La lucha contra el cambio climático dio ayer un paso adelante en la cumbre del clima de Poznan (Polonia). Un paso enrevesado, complicado, rebuscado, inextricable -como la ONU- y cuyo alcance se podrá valorar con el tiempo. Aunque los 187 países reunidos se dejan el grueso de la negociación para el año que viene, en el texto acordado se alude por primera vez a cifras concretas de limitación de emisiones para los grandes países emergentes como China e India.
Tendrán que limitar sus emisiones entre un 15% y un 30% en 2020 respecto a la tendencia actual. Es decir, podrán crecer, pero a menor ritmo. Siempre que haya un acuerdo el año que viene en Copenhague.
Esto es un avance respecto a lo acordado hace un año en la cumbre del clima de Bali, ya que allí los países en desarrollo pactaron que limitarían sus emisiones -siempre que recibieran enormes sumas de dinero y tecnología- pero no incorporaron ninguna cifra.
Esa alusión es lo que ha permitido desbloquear la cumbre, ya que el día anterior Japón, Canadá, Australia y Nueva Zelanda habían puesto en peligro hasta el objetivo de reducir las emisiones entre un 25% y un 40% los países desarrollados pactado hace un año. (DPA)