Una vez que las parejas deciden casarse por el Registro Civil, la siguiente pregunta parece obvia: "¿Y por la Iglesia también nos casamos?".

Y la conclusión también resulta una obviedad. Si cada vez se casa menos gente en el Registro Civil, en la Iglesia -al menos en la Católica- las estadísticas en materia de matrimonios contraídos "ante Dios" también se redujeron notablemente en los últimos años.

El propio vicario general de la Diócesis del Alto Valle, Jorge Fernández Pazos, reconoció las magras cifras, ya que por estos días están llevando adelante un recuento de los casamientos registrados en poco más de una década.

Los datos a comparar corresponden a 1994, año en que unas 468 parejas de novios decidieron formalizar su unión en el altar y ante un sacerdote.

Los últimos registros son los del año pasado, cuando se concretaron 261 enlaces, por lo que las estimaciones para este 2008 son todavía menores.

"Muy permisivos"

Para el religioso, el primer punto a tener en cuenta es que en la sociedad actual hay una mayor permisividad hacia las uniones de hecho. "No solamente existe una aceptación sino que también a veces se las facilita", comentó el sacerdote, quien reconoció que la Iglesia no tiene una postura tomada con respecto al tema y es por eso que se está avanzando en el análisis profundo.

"Existen muchos casos para tener en cuenta. Hay gente que decide convivir directamente pero hay otras parejas que previamente conviven y después deciden formalizar su situación", comentó Fernández Pazos, quien asegura que las cifras demuestran que casarse por la Iglesia ya no es "tan común".

-¿Existe una autocrítica por parte de la Iglesia, ya que la gente no tiene tanto interés en confirmar su unión ante Dios? -fue la pregunta efectuada por un periodista de este diario, a lo que el sacerdote contestó que no cuentan con los medios necesarios para convencer a las personas sobre los beneficios de llegar al altar.

"¿Cómo se puede hacer desde un púlpito para competir con el alcance de los medios de comunicación, que generan una cultura en contra de la institución familia? Y justamente eso es lo que genera el matrimonio", concluyó el entrevistado.