Lanús es un equipo de pibes guapos, que tienen coraje y que ya dejaron en claro que lucharán hasta el final. El "Granate" profundizó más la crisis de Vélez al vencerlo por 2-0 en el Amalfitani y quedar a un punto de Boca, que mañana se enfrentará con Gimnasia de La Plata (pág. 46).

Es cierto que si el "Xeneize" suma de a tres en el estadio Único, Lanús quedará inmediatamente fuera de la lucha para la última fecha del Apertura. Pero, quién le quita méritos a este equipo de Zubeldía, liderado por un "Pepe" Sand que es el goleador del torneo (15) y que ayer volvió a marcar.

En el partido de ayer, el "Granate" tomó la iniciativa y encontró un rápido premio, a los 8 del inicio, porque Maximiliano Velázquez ejecutó un tiro libre corto para Eduardo Salvio y el juvenil, de espalda al arco rival, avergonzó a Leandro Coronel y Fabián Cubero, y habilitó a Diego Lagos, que no perdonó.

El equipo de Zubeldía logró la diferencia porque entre sus virtudes figuran la versatilidad de su medio y la frescura de Sebastián Blanco, Salvio y Lagos, así como también la siempre importante presencia de Sand en el área.

Pero tras el 1-0, el visitante se replegó y esperó un error de Vélez para aumentar la diferencia. Esa decisión fue peligrosa, y Vélez casi encuentra la igualdad con un tiro libre de Zapata que dio en uno de los palos y una entrada de Nicolás Cabrera que forzó una gran tapada de Carlos Bossio.

El local buscó el empate por el sector derecho de la defensa de Lanús, que muchas veces evidenció fallas atrás, pero que tuvo a un Bossio en gran nivel.

En el capítulo final Lanús consiguió de contragolpe el tanto que esperaba para consolidar su triunfo. A los 13 hubo un pase largo, Cubero intentó controlarlo, pero falló, Lagos le quitó el balón, buscó a Sand y el artillero definió sutilmente abajo y a la izquierda de Marcelo Barovero.

Vélez procuró variantes ofensivas, pero Lanús puso a Matías Fritzler y así se hizo más fuerte para recuperar el esférico en la mitad. Además esta vez Bossio ofreció garantías en el arco.

El conjunto que ahora es escolta dispuso de espacios para meter réplicas y por esa vía hasta pudo haber goleado, aunque hubiese sido una exageración.

Lo negativo para el aspirante al título en la noche de Liniers fue que el volante Adrián Peralta se lesionó la rodilla derecha y el defensor Santiago Hoyos recibió su quinta tarjeta amarilla, por lo que se perderá el cotejo decisivo ante San Martín de Tucumán en el Néstor Díaz Pérez.

Lo concreto es que los granates dieron otro paso valioso para prolongar su sueño de bicampeón doméstico. Será difícil, pero todavía las matemáticas lo mantienen vivo.