El Estadio Ciudad de La Plata podría llegar a ser testigo de un nuevo campeón en el fútbol argentino. Claro que para ello, Boca deberá no sólo superar a Gimnasia, sino también esperar que Tigre y San Lorenzo no ganen sus respectivos compromisos.
Pero en el seno del plantel ´xeneize´ no quieren ni pensar en esa posibilidad. Prefiren ir partido a partido, analizando los peligros que puede presentar el ´Lobo´. El entrenador Carlos Ischia decidió ayer en Casa Amarilla que el uruguayo Álvaro González sea el reemplazante del suspendido Jesús Datolo.
El objetivo de colocar al volante oriental obedece a que Ischia pretende una mayor contención en el mediocampo, considerando que por el sector izquierdo se moverá el escurridizo Ignacio Piatti. "Me siento bien por las dos bandas, aunque por la izquierda por ahí puedo meter alguna buena diagonal y quedar frente al arquero", dijo esperanzado Alvaro cuando se refirió al puesto que ocupará en la línea media xeneize.
En un momento del entrenamiento de ayer se especuló con la vuelta de Rodrigo Palacio, quien se recupera de una pubialgia, porque en la práctica jugó para los suplentes, pero es probable que ni siquiera esté entre los concentrados. El médico del plantel de Boca, José Veiga, esperará 48 horas más para ver la evolución de la lesión de Palacio, pero el delantero recién volvería a jugar en la temporada que viene.
La formación xeneize que arrancará jugando en el estadio Ciudad de La Plata será la siguiente: Javier García; Hugo Ibarra, Julio Cáceres, Juan Forlín y Claudio Morel Rodríguez; Fabián Vargas, Sebastián Battaglia y Alvaro González; Juan Román Riquelme; Luciano Figueroa y Lucas Viatri.