NEUQUÉN (AN).- Gigantes del Sur marcha cuarto en la Liga Argentina de voley, como resultado de un buen arranque en lo deportivo, pero su entrenador Alejandro Grossi advierte que "tenemos carencias, que nos van a pasar facturas. Hay un límite".
Ayer, previo a subirse al colectivo para viajar a Córdoba, donde mañana el equipo se medirá con Belgrano, el DT analizó que "fue un arranque muy bueno si se tienen en cuenta las vicisitudes que afrontamos. De no jugar la Liga, llegamos a la final de la Aclav y estamos participando sin saber si la vamos a terminar. Tiene sabor a doble satisfacción".
Grossi aludió "al agujero en el presupuesto", más allá del esfuerzo de los dirigentes. "En la medida en que no podamos completar el apoyo de sponsors, en enero comenzarán las dificultades. Hacemos el trabajo de un equipo chico, de hormiga, vendemos camisetas, para estar al día", completó.
Como dato vale apuntar que varios de los que están arriba junto al "Dino", como La Unión o UPCN, viajan en avión, mientras que el representante neuquino lo hace en colectivo. "A la vuelta de San Juan se rompió y estuvimos más de 20 horas ´tirados´", dijo.
En lo deportivo, el entrenador afirmó que "Bolívar no es nuestro rival, está más allá. Estar entre los cuatro es muy bueno, aunque la ambición no la resignamos, pero tenemos carencias, límites, que nos van a pasar factura".
"Peleamos entre los mejores -agregó-, pero somos concientes que La Unión y UPCN se armaron para estar en la final. Nosotros los miramos de reojo, apuntamos a ellos, pero tienen planteles más largos y otra infraestructura. Queremos estar ahí, lo que hacemos hoy es invertir para llegar de la mejor manera a los play offs", expresó Grossi.
En referencia a ese objetivo y los problemas que sobrellevan, el DT aclaró que "si podemos bien y si no, habrá que tener paciencia".
