NEUQUÉN (AN/ACE) - "Si yo fuera fiscal me quedaría tranquilo, porque aquí hay elementos muy contundentes, desde los testimonios a la prueba documental, por lo cual confío que se llegará a una sentencia que haga justicia", dijo ayer el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Eduardo Luis Duhalde.
El funcionario presenció la audiencia de ayer y mantuvo sucesivos diálogos con los periodistas. Destacó la trascendencia de todos los juicios que se hacen en el país a imputados por delitos de violación a los derechos humanos en la época de la dictadura y que su participación es una expresión de respaldo a la Justicia confiando en que se haga una justa valoración de las pruebas y se arribe a una condena del terrorismo de Estado.
Ante la pregunta dijo que conoce esta causa, no tanto como las que el organismo que conduce es querellante, pero igualmente la conoce.
"La prueba es contundente, coherente para este tipo de juicio donde se tiene que articular mucho, no sólo en la prueba testimonial sino en lo que son indicios, claros, precisos, circundantes, puesto que todo propósito del Estado, porque estamos hablando del propio Estado, cuando violó toda ley, todo derecho, lo hizo tratando de no dejar rastros. Entonces hay que armonizar todos los elementos", señaló.
En cuanto a la posibilidad de acelerar los juicios, opinó que "es complejo, porque éstas son causas que nacieron divididas. Veinte años se perdieron por las leyes de obediencia debida, punto final e indultos. Se hace todo lo posible pero no es tarea fácil ese aceleramiento que todos piden. También depende de los propios medios del Poder Judicial. Puede faltar voluntad de hacerlo de algunos tribunales, pero en general hay una complejidad objetiva para hacerlo más rápido".
