Hay que admitir que Britney Spears domina a la perfección el arte de la autopromoción.
Princesa del pop caída en desgracia, esposa divorciada y madre inhabilitada, la cantante resurge como el Fénix de las cenizas: su nuevo álbum "Circus", en cuya tapa aparece sonriendo más rubia y dulce que nunca, debe trazar una línea final debajo del capítulo más sombrío de su vida. "Casi no puedo esperar para compartir el álbum con mis fans", dijo.
El álbum será lanzado al mercado en los Estados Unidos mañana, el día del cumpleaños número 27 de Britney.
"Lo queríamos como regalo de cumpleaños para ella y para el mundo", dijo el manager Larry Rudolph.
Desde hace semanas se está preparando el acontecimiento como si se tratara del casamiento del emperador de China. Como anticipo, en septiembre apareció el primer sencillo, "Womanizer", que logró en octubre llegar al número uno del chart de los Hot 100 de Billboard en un tiempo record.
Además, hay varios nuevos videos publicitarios y ante todo un documental de 90 minutos titulado "Britney: For the Record", que emitió el canal de música estadounidense MTV ayer y que en la región se podrá ver hoy a las 19:30 por Sony Entertainment Television .
De manera inexplicable, cada día llegan a la opinión pública nuevos fragmentos de citas, que no son reproducidos sólo por las revistas de chismes de todo el mundo: el fenómeno mediático Spears ya no es pasado por alto por nadie.
Como si no fuera suficiente ajetreo publicitario, el sitio de música imeem anunció sorpresivamente que el álbum se puede escuchar allí online, con el consentimiento del sello de Britney Jive/Zomba (http://imeem.com/ britneyspears).
"Britney es una de las artistas más grandes del mundo y estamos orgullosos de poder celebrar el estreno de su nuevo álbum", indicó el fundador de imeem, Dalton Caldwell.
Hace un año, Spears, quien con 83 millones de discos vendidos es una de las cantantes que más dinero ganó en el mundo, anunció su regreso tras una serie de problemas en su vida privada.
Su álbum de entonces, que lleva el lóbrego título "Blackout", tuvo una buena llegada a los fans y críticos, pero no catapultó a la cantante a las primeras planas. Aún quedaban abiertas demasiadas preguntas de su pasado.
Pero ahora algo ocurrió. En los MTV Video Music Awards, la cantante de 26 años obtuvo en setiembre en Los Ángeles tres premios por su video "Piece of Me", entre ellos la máxima distinción de "video del año". Y en el documental, del cual trascendieron algunos fragmentos, intenta terminar con el desdichado capítulo de su vida.
"Creo que me casé por motivos incorrectos", dijo con respecto a su matrimonio con Kevin Federline. "Dejé que entren en mi vida personas que eran malas", indicó. "Perdí totalmente el camino. Perdí mi objetivo, me perdí a mí misma".
Tras numerosas aventuras, en octubre del 2007 perdió la tenencia de sus hijos Sean Preston, de tres años, y Jayden, de dos.
A comienzos del 2008, dos episodios de trastornos psíquicos hicieron que la declararan incapacitada y desde entonces está bajo la tutela de su padre.
"Nunca quise ser una prisionera", se queja Spears en el documental.
"Siempre me quise sentir libre. Creo que ahora aprendí mi lección y suficiente es suficiente". (DPA/AR).