Ahí está Lanús. Como hace un año, metido otra vez en la lucha franca por ser nuevamente el campeón del fútbol argentino. No le fue fácil anoche ante Arsenal, el equipo del Viaducto comenzó ganando, pero el fútbol del conjunto de Luis Zubeldía afloró cuando más se lo necesitaba, lo dio vuelta y ahora le mete presión al lote de vanguardia.
Las tres unidades quedaron en poder de Lanús de un modo inobjetable, porque ratificó que dispone de un juego técnico y efectivo. Pero antes del final del PT un error de Bossio, le permitió a Matos marcar la apertura.
En la segunda parte el "Granate" salió a buscar el resultado y pronto logró el tan ansiado empate, porque Lagos mandó un centro desde la derecha y Gandolfi se equivocó y batió a su propia valla.
El equipo de Zubeldía se entusiasmó con el 1-1 y se lanzó en procura de la victoria que precisaba para mantenerse en la lucha por el título y también lo consiguió sin tener que esperar demasiados minutos.
A los 14, se asociaron Blanco y Sand, el delantero hizo la devolución por abajo hacia el corazón del área y el volante apareció en escena vacío y certero, como para ratificar que era el protagonista de la noche sureña.
Con el marcador en su favor el aspirante al título mantuvo el control del balón y Arsenal careció de respuestas futbolísticas. Lo concreto es que Lanús dio un paso enorme hacia adelante y lo hizo una vez más como cultor del buen gusto futbolístico.
Fueron seis puntos
En el típico partido de 6 puntos, Gimnasia (Jujuy) logró un gran triunfo sobre San Martín (Tucumán) y, de paso, se transformó en el capo del norte. Como indicaban los pronósticos, fue un encuentro duro, muy trabado, que se definió con una pelota parada, gracias a Gabriel Loeschbor.
El "Lobo", que tiene muy buenos números de local, justificó el triunfo a partir de un trabajo ordenado en el mediocampo. Sin brillar, fue superior ante un rival limitado, que está muy lejos del que sorprendió en el arranque del torneo.