La tranquilidad de los preparativos para los comicios internos del peronismo bonaerense se vio rota ayer por los balazos disparados frente a la casa de la intendente de Luján, Graciela Rosso, quien relacionó el hecho con la puja por el control del PJ local con su adversario, el ex intendente Miguel Prince.
Rosso, que competirá con Prince, denunció que el atentado ocurrió a pocas horas de que la intendenta presentase un pedido de nulidad de las elecciones internas del PJ de Luján "por adulteración y fraude de los padrones".
Advirtió que su sector no va "a participar de una elección donde están fraguados los padrones, porque sería un fraude a nuestro afiliados, a la democracia y a los ciudadanos en general".
Por su parte, Prince explicó que el padrón del PJ de Luján, presidido en la actualidad por Luis Vanin, no llega a los 8.500 afiliados y los nuevos son 1.400 que "cumplieron los requisitos de la Junta Electoral provincial, incluyendo las fotocopias del DNI de los nuevos afiliados".
Ese sector atribuye la serie de denuncias de Rosso a su "derrota segura" en las internas del PJ de hoy.
El peronismo bonaerense elige autoridades hoy, en unos comicios en donde hay una lista única en la mayoría de los distritos, pro gestiones del ex presidente Néstor Kirchner (ver aparte).