NEUQUÉN (AN/ACE).- Después de 30 años de cometidos los delitos, en el juicio se demostró la "vocación de impunidad" con el que fue concebido el "plan sistemático" desplegado por la dictadura militar que fue comprobado hace más de 20 años durante el Juicio a las Juntas, sostuvieron los querellantes.

"Este proceso no es más que parte de la historia de la Argentina, estamos juzgando esto y tenemos que ponerle fin", abrió ayer el alegato el querellante Bruno Bonetti, seguido luego por la descripción de las 17 denuncias y los aportes logrados en el juicio descriptos por María Suárez Amieva y el pedido de sentencia de Juan Manuel Kees. Se dieron detalles del ocultamiento de los datos y de la negativa de reconocer la existencia del centro clandestino. "Los hechos fueron planeados, pensados y ejecutados buscando la impunidad, todo fue hecho en clandestinidad al amparo de los poderes del Estado", dijo Bonetti.