JUNIN DE LOS ANDES (ASM).- El Consejo Provincial de Educación propuso a la comunidad Painefilú la suspensión hasta el 10 de diciembre de la resolución 1.711, con vistas a su rectificación. Esa norma, que mantenía el actual estatus de la escuela pública rural Mamá Margarita, había precipitado una nueva ocupación del predio ubicado en Pampa del Malleo, donde los mapuches quieren implementar un sistema de educación intercultural y de gestión comunitaria.
Al cierre de este despacho, las familias nativas evaluaban la propuesta.
Los Painefilú, acompañados por representantes la Confederación Mapuche, se reunieron en la sede del CPE con los vocales del cuerpo colegiado presidido por la subsecretaria de Educación, Patricia Ruiz.
La propuesta, como se apuntó, se basa en la suspensión de la controvertida resolución hasta el 10 de diciembre, "para su rectificación", en tanto que también se suspende el funcionamiento del albergue escolar por el presente ciclo, que constituía otra de las demandas de los mapuches, quienes se oponen a esa modalidad contraria a su cosmovisión, según se indicó.
Asimismo, se impulsa la creación de una comisión integrada por diversos actores de la comunidad educativa de Pampa del Malleo y del Colegio Provincial de Educación, con el objeto de analizar la propuesta educativa de gestión comunitaria.
Otro de los puntos del principio de acuerdo se basa en garantizar la estabilidad laboral del personal del establecimiento en la etapa de transición, que era exigencia del propio CPE.
En el acta se fijaron nuevas fechas de reunión para evaluar las respuestas y futuras acciones.
La historia del conflicto
Conviene recordar que en setiembre pasado, el gobierno provincial confirmó que avanzaría hacia la creación de una escuela intercultural en "Mamá Margarita", luego del controvertido retiro de la congregación María Auxiliadora de Junín, que transfirió el establecimiento al Consejo de Educación en medio de otro conflicto con un sector de la comunidad mapuche Painefilú, encabezada por el lonco Miguel Huenuquir.
La disputa se inició en agosto de 2006, cuando la comunidad Painefilú pidió a las monjas que se retirasen del colegio que ocupaban desde 1978, pero que está ubicado en territorio mapuche.