| ||
Incendio dejó un nene muerto y dos heridos | ||
Ardió entera una casa de madera en el barrio Lera, de Bariloche. El chiquito se escondió en un mueble y no pudieron rescatarlo. | ||
SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- En un incendio que destruyó una vivienda de madera situada en el barrio Lera murió un chiquito de dos años que trató de refugiarse del fuego encerrándose en un mueble. Antes de que las llamas envolvieran la construcción la madre del menor alcanzó a rescatar a su nena de 6 meses, pero pese a su desesperación no pudo encontrar a su hijito, ni imaginarse que podría haberse ocultado del fuego escondiéndose en un mueble. El padre y el tío de la víctima fueron derivados de urgencia al Hospital Zonal y quedaron internados en terapia intensiva con asistencia respiratoria mecánica, debido a las quemaduras que sufrieron en las vías respiratorias y la intoxicación con monóxido de carbono que aspiraron mientras intentaban apagar el incendio. Junto con ellos ingresó la madre de la víctima, que fue atendida en forma ambulatoria por la profunda angustia que le generó el trágico episodio, y luego permaneció en el nosocomio para acompañar a sus familiares. El incendio se inició minutos antes del mediodía de ayer en una vivienda ubicada frente al 1545 de la calle Los Colihues, en la estribación superior de la Barda del Ñireco, al este del barrio Lera. Las causas del siniestro las investigan los expertos de la Policía provincial que hasta ahora prefirieron no arriesgar ninguna hipótesis, pero los vecinos comentaron que allí funcionaría una carpintería, y en el aserrín y la viruta acumulada se habría iniciado el fuego, que por efectos del viento se propagó a la vivienda en pocos instantes. Al advertir el peligro Rocío Marín Nahuelquín retiró de la vivienda a su beba de tres meses y la puso a salvo, pero no pudo ubicar a su hijo Kevin Brian, de sólo dos años, quien pereció quemado y recién fue hallado cuando los bomberos lograron aplacar las llamas. La circunstancia desató una serie de escenas desgarradoras, tantas que no permitían diferenciar a sus familiares directos de sus vecinos o conocidos, y varias personas debieron ser atendidas en las ambulancias que se habían concentrado en esa calle, ante cientos de curiosos. Rocío Nahuelquín fue derivada al hospital en estado de shock, en tanto que su esposo, Leandro Brian, quedó internado en terapia intensiva junto a un hermano, ambos en grave estado y en coma inducido para que puedan recibir asistencia respiratoria. Kevin es la tercera víctima fatal del fuego en los dos meses transcurridos de la presente primavera. En la madrugada del pasado 11 de noviembre, Magdalena Díaz, de 43 años, que sufría alteraciones mentales, murió al incendiarse la cabaña de madera en que se domiciliaba, a la altura del kilómetro 23 de la avenida Exequiel Bustillo. El último 30 de setiembre, una mujer de 42 años, Alicia Lefiñanco, murió en un hecho similar al incendiarse la vivienda de madera que habitaba y quedar aislada dentro de su dormitorio, ubicado en el predio de Saenz Peña 2.132, en el barrio Las Mutisias. La situación de peligro y la reubicación definitiva de las viviendas de la Barda del Ñireco, donde está asentada la casa destruida por el fuego, fue una de las prioridades de cada gobierno municipal desde hace 20 años, pero fueron muchos los vecinos que en su momento no quisieron trasladarse a las 34 Hectáreas, en parte adquiridas a ese efecto, y otros siguieron ubicando allí sus domicilios, desafiando la acción de los elementos. El riesgo principal siempre lo constituyó la posibilidad de desmoronamientos o fracturas, que han afectado a construcciones en apariencia muy sólidas, pero a las casas de madera, más resistentes a los derrumbes, siempre las acecha el fuego. | ||
Use la opción de su browser para imprimir o haga clic aquí | ||