NEUQUÉN (AN)- La adolescente que denunció que la raptaron y violaron dijo que fue más de una persona la que abusó sexualmente de ella. Así trascendió ayer de fuentes vinculadas con la investigación de este caso aún rodeado de detalles oscuros. También se supo que la agresión sexual fue corroborada por los médicos, y que le realizarán exámenes bioquímicos a la víctima para tratar de establecer si fue drogada, como ella denuncia.
En tanto no hay novedades sobre el o los autores de este hecho y se espera que la víctima pueda dar más precisiones sobre sus condiciones físicas.
La joven, cuya identidad se mantiene en reserva, aún no pudo declarar ante la fiscalía porque sigue en estado de shock. Es su madre la que hace conocer detalles a la policía a medida que su hija le cuenta algunas cosas.
El hecho sucedió, según la denuncia presentada en la comisaría 21, a partir de las 18 del miércoles. La adolescente salió de su casa en el barrio Gregorio Álvarez hacia la vivienda de una amiga en Melipal, y cuando atravesaba ese barrio un hombre al volante de un automóvil la invitó a subir. Ella se negó y el sujeto la obligó a subir por la fuerza.
Le tapó la boca con la mano, la amenazó con un arma de fuego y le vendó los ojos. En esas condiciones la llevó hasta un sector de la meseta y la obligó a ingresar a una casilla de chapa. La víctima relató que no pudo ofrecer resistencia porque le dieron algo para tomar que la dejó "como anestesiada". La dejaron en inmediaciones de su vivienda alrededor de las 6 de la madrugada.
Fuentes vinculadas con la investigación explicaron que el análisis médico corroboró que sufrió una agresión sexual. El examen bioquímico en orina demostrará si tomó alguna sustancia y de qué naturaleza.
A simple vista daba la impresión de que su estado no era normal, según dijo el primer profesional que la asistió apenas descubierto el caso.
Por otra parte, trascendió que la madre de la joven se presentó en la comisaría 21 para ampliar la denuncia. Indicó que según su hija fueron dos los individuos que abusaron de ella.
También habría aportado otros detalles que no fueron suministrados para no entorpecer la investigación. Los pesquisas rastrillaron la meseta para tratar de ubicar la casilla donde se habría consumado el hecho, aunque esa búsqueda todavía no arrojó resultados positivos.
La investigación está a cargo de la fiscalía de Graves Atentados contra las Personas, el juzgado de Instrucción 5, el departamento Seguridad Personal y la comisaría 21 de Melipal.