GINEBRA (AP).- Una obra de 23
millones de dólares creada por el
artista español Miguel Barceló y que
ha sido criticada por su excesivo
precio se develó ayer en la sede de las
Naciones Unidas en Ginebra. La
cúpula de 1.500 metros cuadrados, de
colores vivos y aluminio rasgado, llevó
más de un año de trabajo.Barceló usó
más de 100 toneladas de pintura con
pigmentos de todo el mundo y trabajó
con arquitectos, ingenieros y hasta
laboratorios de partículas físicas para
desarrollar el aluminio extrafuerte de
la bóveda.“En un día de calor
inmenso en medio del desierto del
Sahara, recuerdo vivamente el
espejismo de una imagen del mundo
goteando hacia el cielo’’, contó
Barceló