El gobierno nacional prepara un plan de inversión en obras públicas, de promoción del sector industrial (con eje en el sector automotriz y textiles) y concesión de subsidios a trabajadores, con el fin de hacer frente a los efectos negativos de la crisis financiera internacional sobre el nivel de actividad y el empleo.
Así lo oficializaron ayer el ex presidente Néstor Kirchner, quien dijo que se apelará a planes "neokeynesianos", el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, y el jefe de Gabinete, Sergio Massa.
Kirchner ratificó el plan al disertar en el marco de un foro progresista en Chile, durante el cual pidió a los países de la región prepararse para que la crisis no impacte en Sudamérica como ocurrió en Estados Unidos y Europa.
Paralelamente, en Buenos Aires, el ministro de Trabajo Carlos Tomada se comprometió ayer con la cúpula de la Central de los Trabajadores Argentinos (CTA), a aplicar procedimientos destinados a "evitar despidos", en los próximos "45 a 60 días" que incluyen la "aplicación se subsidios" para sostener puestos de empleo.
Así lo expresó el titular de la CTA, Hugo Yasky, luego de una reunión de más de dos horas que las partes mantuvieron en la sede de la cartera laboral.
En ese contexto, el Ministerio de Trabajo informó que en la reunión se consideraron algunas actividades críticas" sobre las que se están trabajando no sólo con instrumentos administrativos sino también a través de la mecánica de subsidios para sostener el empleo". Tomada explicó que "se trata de acciones e iniciativas donde cada uno de los actores, aporten medidas para evitar despidos", y señaló que "el gobierno se comprometió a aportar soluciones en el tema, profundizando las respuestas sectoriales".
El ministro advirtió además a algunos empresarios para que se pongan a la altura de las circunstancias y no tomen decisiones apresuradas" porque "no es lógico que los errores financiaron de otros lugares del mundo, los tengan que pagar desde lo económico, nuestros trabajadores".
Por su parte, Yasky explicó que el compromiso oficial para evitar despidos es "de 45 a 60 días hasta tanto se pueda analizar la profundidad de la crisis mundial para poder evaluar aplicación de otras medidas alternativas como un mega plan de inversiones en el sector público". Además, el ex mandatario puso en duda pronósticos que indican que va a subir la pobreza por la crisis y llamó a tomar medidas en el marco de "proyectos neokeynesianos para potenciar la actividad, el empleo, el trabajo y solucionar los problemas de infraestructura que tienen nuestras ciudades".
Además, el docente dijo que el ministerio "obligará al sector empresario a abstenerse a producir despidos sin tener cubierto, el procedimiento preventivo de crisis". Por último y en relación a las personas que cobran los Planes Trabajar, Yasky dijo que para ellos "se esta tratando de volcarlos hacia una garantía de salarios". (DyN, Redacción Central)
