WASHINGTON.- El desempleo se disparó brutalmente en octubre en Estados Unidos a 6,5%, su mayor nivel en más de 14 años, con una ola de supresiones de empleo digna de una profunda recesión, que confirma la dura tarea que le espera a la futura administración de Barack Obama.
La primera economía mundial perdió 240.000 empleos. Desde enero, empresas y administraciones despidieron cada mes más de lo que contrataron, según cifras publicadas ayer por el departamento de Trabajo.
El ministerio revisó además al alza su estimación de la cantidad de empleos perdidos en agosto (a 127.000) y en setiembre (a 284.000). La cifra de desempleados creció así hasta un nivel desconocido desde marzo de 1994. En setiembre, la tasa de la desocupación fue estimada en 6,1%. "La tasa de desempleo podría superar la barrera del 7% a principios del año próximo. Ya superó el nivel de junio del 2003 y la pendiente de la tendencia es casi vertical", se inquietó Ian Shepherdson, economista del instituto High Frequency Economics.
El Departamento de Trabajo destacó la fuerte aceleración de la degradación del mercado del empleo acaecida desde finales del verano boreal: si 1,2 millones de puestos fueron suprimidos desde principios de año, "más de la mitad de esta baja tuvo lugar en los últimos tres meses".
Stephen Gallagher, economista de la Société Générale, reveló que había que remontarse al cuarto trimestre del 2001 para encontrar despidos tan masivos.
Pese a los datos del desempleo y a que las principales automotrices de Estados Unidos, Ford y GM, registraron fuertes pérdidas trimestrales, las bolsas estadounidenses subieron ayer después de dos días de caídas.
El alza de Wall Street fue atribuida a la especulación de que la Reserva Federal bajará las tasas de interés el próximo mes para combatir el aumento en el índice de desempleo.
El Dow Jones ganó ayer 248,02 puntos o un 2,85%, para ubicarse en los 8.943,81 unidades.
El Nasdaq, por su parte, subió 38,70 puntos o un 2,41% para alcanzar las 1.647,40 unidades.
Ford informó que en el tercer trimestre sufrió unas pérdidas después de impuestos de casi 3.000 millones de dólares, mientras que GM tuvo pérdidas de 4.200 millones de dólares en el mismo período.
(AFP/DPA)
