Las principales bolsas del mundo, incluyendo las de América latina, se desplomaron ayer a pesar de los fuertes recortes de tasas de referencia del Banco Central Europeo (BCE) y el Banco de Inglaterra, debido a la creciente certeza de una recesión internacional en 2009.

El mercado internacional revivió un día de retroceso, con la caída del crudo, el oro, las materias primas y las plazas bursátiles, mientras los datos de las empresas siguieron mostrando una creciente desaceleración de la economía global, que se encamina hacia una recesión, según un informe difundido por el Fondo Monetario Internacional.

El petróleo perdió ayer 4,5 dólares hasta 60,77 unidades el barril en Texas y el oro cedió 1,3 por ciento hasta 730 dólares la onza troy, una tendencia a la baja que copiaron el aluminio, el gas natural, la plata, el café, el cacao y los granos.

En Wall Street, el índice industrial Dow Jones perdió 4,85 por ciento, el selectivo S&P500 se hundió 5,03 por ciento y el tecnológico NASDAQ cedió 4,34 por ciento. La caída de dos días alcanzó un total aproximado del 10% en los principales índices.

La señal más deprimente fue la de la productividad agrícola de la economía norteamericana, que en el tercer trimestre bajó a 1,1%, frente al 3,6% precedente.

En cuanto a la evolución del mercado de trabajo norteamericano, los pedidos semanales de subsidios de desocupación bajaron 4.000 unidades a 481.000, una reducción inferior a la esperada. Este es el nivel más alto de desempleados con apoyo desde febrero de 1983, cuando la economía estaba siendo afectada por una recesión tardía.Por otra parte, el mercado aguarda con expectativa el dato sobre desocupación de Estados Unidos que será difundido mañana, así como los resultados de las mayores empresas automotrices, sobre las cuales se temen importantes pérdidas.

En Europa, la Bolsa de Londres perdió 5,7 por ciento, la de París 6,38, la de Francfort 6,84, la de Madrid 6,27, la de Milán 5,06 y la plaza bursátil de Moscú cedió más de 6 por ciento.

Las caídas en Europa ocurrieron a pesar de los fuertes recortes de tasas de referencia: el Banco de Inglaterra apostó fuerte y la bajó 150 puntos básicos, mientras el BCE decidió dejarla en 3,25 por ciento, una poda de 50 puntos.

Europa extendió los malos resultados de Asia, donde la bolsa de Tokio se hundió ayer 6,53 por ciento, la de Hong Kong 7,1, la de Seúl 7,6, la de Sidney 4,30, la de Shanghai 2,44 y la de Yakarta se desplomó 4,3 puntos porcentuales.

En América Latina, la moneda de Brasil, el real, perdió 4 por ciento hasta 2,20 unidades por dólar, mientras en la Bolsa de San Pablo, el índice BOVESPA cayó 3,8 por ciento, en una jornada sin operaciones en Argentina por el feriado bancario. Las caídas se extendieron a las principales bolsas de Chile (-2,81 por ciento), Perú (-6,84) y México (-3,9), tres países en los que también se desvalorizó su moneda.

La depreciación de las divisas de América Latina, en especial la de Brasil, un país con el que Argentina mantiene un fuerte vínculo comercial, han presionado aquí sobre la cotización del dólar, lo que ha llevado al Gobierno de Cristina Fernández a ejercer su poder de policía en el mercado de cambio.

El dólar se apreció a 1,27 unidades por Euro.

El Real se canjeó a 2,20 unidades por dólar, diez centavos más que el miércoles. En tanto, el oro cedió 1,32 por ciento a 732,6 la onza troy. (DyN/AFP)