ROCA (AR).- El cuartel de bomberos de esta ciudad continúa arrastrando viejas carencias, en medio de una situación institucional todavía frágil. La protección física de los efectivos es el punto más débil, paradójicamente, ya que solo cuentan con cuatro equipos completos para un total de 60 bomberos.
Según se conoció, en estos días se produjeron nuevos cambios en la comisión directiva, pero el panorama aún dista de poder modificarse en el corto plazo, ya que las carencias son moneda corriente y los recursos para hacerle frente son escasos.
El nuevo jefe de la asociación de Bomberos Voluntarios, José Achares, y Marcelo Zúñiga, sargento de la institución, son quienes prácticamente llevan las riendas del cuartel en la actualidad. Ambos hicieron hincapié en las fuertes carencias que atraviesa Bomberos. "Las unidades que tenemos son bastante viejitas pero gracias a Dios en cada emergencia todavía nos responden", comentó Achares, aunque la demanda poblacional cada vez es más amplia.
El cuartel cuenta actualmente con dos camionetas, una unidad de rescate y cinco "unidades pesadas" que son los autobombas. Sin embargo, "para lo que es la ciudad y el crecimiento urbano necesitaríamos más que estas unidades, con que nos ayuden con una más, mejor", aclaró Zuñiga, aunque opinó que entre las necesidades prioritarias, se encuentra la de equipar adecuadamente a cada bombero. "Podemos tener muy lindas unidades pero si el bombero no esta protegido no sirve, una vez logrado esto se debe pensar en el resto", indicó. "Ahora hay solo 4 equipos para 60 bomberos, es imposible trabajar así, en un incendio de grandes dimensiones los bomberos no están protegidos correctamente", mencionaron.
Actualmente se están haciendo los trámites pertinentes para conseguir equipamiento, esto incluye mamelucos, botas y cascos. "Ya se ha hablado con la comisión, nos dijeron que se está trabajando para tratar de conseguir todo lo que se necesita, porque hay que ir paso a paso ya que de a poquito queremos encaminarnos", comentó el Jefe.
A esta problemática se suma la dificultad para comunicarse ante cada hecho, ya que se necesita una mayor cantidad de ´handies´. Sin embargo, aclararon que a pesar de esta falta de aparatos, hay prioridades y se han jerarquizado las necesidades quedando en primer lugar la protección de la vida de cada uno de los bomberos del cuartel.
Con respecto a la sirena que suena con fuerza ante cada una de las emergencias, a pesar de las quejas de los vecinos, argumentaron que hoy por hoy no vaticinan grandes cambios en el sistema por la falta de recursos y porque "es algo necesario para que la gente esté alerta, conozca lo que pasa. Es una herramienta para quienes tienen chacras o establecimientos alejados y no están en el lugar", justificaron.
