NEUQUÉN (AN).- Dos casos de tuberculosis en la Unidad Federal de Detención Nº 9 desataron el temor de una epidemia, por lo que 34 internos, a los que se suma el personal penitenciario, estarán durante tres meses bajo un tratamiento de profilaxis.

El gran despliegue realizado en la mañana de ayer desde la U9 hasta el Hospital Castro Rendón, donde a 15 presos se les realizaron placas de pulmón, despertó las dudas respecto de lo que sucedía puertas adentro del penal.

En principio sólo se habló de controles de rutina, pero una voz alertó que se trataría de un foco de tuberculosis, aunque tampoco se descartó que podría ser neumonía ya que para ambos cuadros se requieren placas radiográficas.

El doctor Juan Carlos Heredia, responsable de la U9, fue quien confirmó que se trataba de unos chequeos producto de la aparición de dos casos de tuberculosis en uno de los pabellones del presidio federal.

"Detectamos un interno con infección respiratoria y lo internamos en el hospital Castro Rendón porque tiene sida. Los análisis que se le realizaron determinaron que tenía tuberculosis por lo que se procedió a realizar una campaña de profilaxis a todos aquellos que convivían con él. En los controles detectamos otro interno más con tuberculosis pero en este caso lo dejamos aislado en el servicio médico del penal. En ambos casos, tras ser evaluados por el servicio de epidemiología del hospital regional, fueron puestos bajo tratamiento", informó el profesional que desde hace 17 años se desempeña como médico dentro del sistema penitenciario.

No obstante, los 34 internos que convivían con los afectados además del personal penitenciario, también se encuentran bajo un tratamiento preventivo.

En todos los casos se están haciendo radiografías de pulmón y en forma diaria deben recibir una dosis de antibiótico, durante tres meses, bajo la supervisión del servicio médico del penal.

"No tenemos ningún otro caso detectado y las placas que se están haciendo -en el hospital regional- son de rutina. De hecho las quince que se hicieron hoy (por ayer) dieron bien, yo mismo las estuve viendo", confió el médico.

Respecto del resto de los internos a los que les está faltando realizar su placa, Heredia explicó: "serán atendidos en la medida que el hospital les dé los turnos porque como están con el paro se complica un poco la atención".

En toda la unidad hay unos 212 internos pero "no hay riesgo para el resto porque no hay contacto directo. Para la tuberculosis se requiere una convivencia de unas 6 a 8 horas días, por lo que la profilaxis es para aquellos que han compartido el mismo espacio por lo que los internos de otros pabellones no corren riesgo", indicó el profesional que se ha puesto a comandar esta situación de alerta que de no controlarse al detalle podría desatar una epidemia en el cárcel.

La tuberculosis es una enfermedad infecto contagiosa que afecta los pulmones y puede ser mortal.

Se contagia cuando una persona sana tiene un contacto diario con otra enferma que al toser o estornudar elimina las bacterias de la tuberculosis, que quedan suspendidas en el aire y pueden ser inhaladas por otra persona.