Miércoles 05 de Noviembre de 2008 Edicion impresa pag. 29 > Policiales y Judiciales
Había denunciado cuatro veces a su pareja
Es la mamá de la beba pateada en la cabeza. Contó la historia de malos tratos a los que fue sometida por González Mendoza. Reclamó al gobierno y a la Justicia que hicieran algo.

NEUQUÉN (AN).- La madre de la beba que fue pateada en la cabeza por su propio padre denunció que se siente desprotegida y reclamó al gobierno y a la Justicia que "hagan algo" para protegerla a ella y amparar a sus hijos. Reveló que ya presentó cuatro denuncias por maltrato contra su violenta pareja.

Flor González (27) está acostada en el piso sobre un colchón que le facilitaron para permanecer en terapia infantil del hospital Castro Rendón mientras aguarda que su beba de dos meses se recupere.

La criatura fue pateada por su padre el sábado pasado mientras ella le daba la teta.

Los médicos indicaron que la nena "ha evolucionado bien pero tiene fractura de cráneo y un hematoma por debajo. Existe un compromiso neurológico y hay que hacerle un seguimiento porque este golpe podría influir en su desarrollo", detalló la jefa del servicio de Pediatría, Teresa Kantolis.

Con el ojo izquierdo morado y el brazo izquierdo todavía visiblemente afectado, Flor dialogó con "Río Negro" y lo primero que pidió fue ayuda.

"Le pido al juez que me ayude, que deje presa a esta persona o que impida que se me acerque. Me siento desprotegida por el Estado y pido que al menos por este hecho, en el que casi fallece mi hija, tomen conciencia y me ayuden", manifestó.

Recién ayer Flor tuvo un momento de felicidad cuando pudo, después de dos días, volver a darle la teta a la pequeña Morena de los Ángeles.

No olvida que son muchas las situaciones de violencia física, psíquica y emocional que ha sufrido.

"No quiero seguir así"

"He vivido amenazada, sexualmente ha abusado de mí y no quiero seguir así. Una vez llegó agresivamente y qué iba a hacer yo, tenía que ceder porque me estaba agrediendo y me amenazaba con que iba a matar a mis hijos. Me decía ´Vos sos una puta y trabajás de puta´ y para que no me pegara yo le tenía que decir sí", contó Flor.

Aseguró que "lo denuncié cuatro veces pero entraba detenido y salía a los dos o tres días. Yo volvía con él contra mi voluntad porque me amenazaba. La última vez que me golpeó me dijo: ´Vos me mandás preso, hija de puta, y te juro que cuando salgo te mato, te prendo fuego a vos y a tu familia´", dijo angustiada la mujer.

Flor conoció a González Mendoza en el 2000 cuando él estaba en la cárcel. Entablaron una relación y el sujeto llegó a fugarse del penal para verla.

La pareja tiene dos hijos: Maximiliano, de 4 años, y Morena de los Ángeles, de dos meses. De una anterior relación, Flor tiene una nena de nueve años que vive con sus abuelos.

Desde hace un año González Mendoza la golpea con frecuencia y a esto se suma que el hombre es adicto a la cocaína y la marihuana.

"Para él drogarse es algo normal. Cada 20 minutos se droga con cocaína o marihuana. Yo esto lo vivía con mucho miedo pero nunca me obligó a consumir. Yo sabía que la droga lo volvía loco y nos empezaba a pegar y eso me generaba mucho temor. Por eso le pido ayuda al juez. Y sé que tengo que empezar de cero y salir a trabajar, por lo que cualquier trabajo es perfecto", concluyó.

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