El senador republicano John McCain admitió hoy su derrota públicamente y aseguró haber telefoneado al candidato demócrata, Barack Obama, para felicitarlo por ser el nuevo presidente electo de Estados Unidos. "Hemos llegado al final de un largo viaje", dijo McCain, que habló apenas unos minutos después de que todas las grandes cadenas de televisión diesen por seguro el triunfo de Obama.
"El pueblo estadounidense habló, y habló muy claramente", agregó ante cientos de seguidores concentrados en su cuartel de campaña en Phoenix, en el estado de Arizona, que abuchearon a Obama en un par de ocasiones.
Con un tono y un gesto serios pero firmes, y acompañado por su esposa Cindy, su candidata a vicepresidenta, Sarah Palin, y el marido de ésta, Todd, McCain pronunció un discurso repleto de mensajes de unidad y reconocimiento para el que denominó "mi presidente". "En una competición tan larga y difícil como fue esta campaña, sólo su éxito merece mi respeto por su capacidad y perseverancia", aseguró McCain, que confesó admirar que Obama hubiese logrado la victoria además "inspirando la esperanza de tantos millones de estadounidenses que una vez pensaron, equivocadamente, que se jugaban poco o que tenían poca influencia en la elección del presidente".
McCain, que calificó de "histórica" la elección, también mencionó el color de la piel de Obama. "Reconozco el especial significado que tiene para los afroamericanos y por el orgullo especial que debe ser suyo esta noche".
El héroe de la guerra de Vietnam hizo un claro llamamiento a sus seguidores para que apoyen al presidente Obama. "Urjo a todos los que me apoyaron a que se unan a mí no sólo en felicitarlo, sino en ofrecer a nuestro presidente nuestra buena voluntad y esfuerzo honesto para encontrar maneras de unirnos", afirmó.
El senador por Arizona, de 72 años, agregó a sus seguidores, algunos de los cuales mostraban lágrimas, que "es natural estar decepcionados". "El fracaso es mío, no de ustedes", sentenció, lo que desató gritos de "¡no!" y "John McCain".
En un emotivo final, McCain agradeció su ayuda a Palin, "una impresionante nueva voz" y, como ex capitán de la armada estadounidense, se declaró una vez más al servicio de su país: "Esta noche, más que ninguna otra noche, tengo en mi corazón nada más que amor por este país y por todos sus ciudadanos".
Fuente: DPA