SAO PAULO (DPA) - Más de la mitad de las industrias de Sao Paulo pretenden reducir las inversiones y el número de empleados en el 2009, para enfrentar la desaceleración de la actividad industrial y la escasez de créditos disponibles derivadas de la crisis financiera mundial.
Así lo resalta un estudio realizado en San Pablo, que hizo hincapié en lo que sucederá en el 2009, de cara a la desaceleración de la actividad industrial y la escasez de créditos disponibles derivadas de la crisis financiera mundial
Según un estudio de la Federación de las Industrias del Estado del Estado de Sao Paulo (FIESP) divulgado hoy, el 57 por ciento de las 658 industrias consultadas prevén reducir las inversiones, y sólo el 27 por ciento de ellas mantendrán lo programado para el 2009. Los industriales consultados explicaron que la decisión de frenar la expansión en sus respectivas áreas se debe fundamentalmente a la reducción abrupta del flujo de financiaciones, que les daba a las empresas los recursos necesarios para mantener el capital de giro, las inversiones y los créditos para la exportación.
Un aspecto preocupante del estudio, divulgado por el diario "O Estado de Sao Paulo", es que son las empresas de gran porte las que sintieron con más énfasis la disminución de los financiamientos. Los datos revelan que la mitad de las mayores industrias nucleadas en la FIESP -la mayor y más importante asociación industrial del país-, informó que el acceso al crédito estaba "más difícil", mientras que el 25 por ciento dijo que estaba "mucho más difícil".
Asimismo, el 78 por ciento de las empresas informaron que estaban pagando "más caro" o "mucho más caro" por los créditos. Como consecuencia de la desaceleración de la actividad industrial habrá una disminución en el índice de empleo en el sector.
El 42 por ciento de las industrias consultadas afirmaron que ya resolvieron reducir el número de empleados en el 2009."El escenario del empleo industrial para el 2009 es de creación menor de puestos de trabajo, no de desempleo", expresó el economista responsable por el estudio, André Rebelo. Explicó que existen "expectativas de crecimiento de ventas en el mercado interno", por lo que, estimó, "el 46% de las empresas deberá mantener el cuadro de funcionarios".
Al mismo tiempo, las grandes empresas brasileñas de capital abierto vieron reducirse en conjunto un 40 % su valor de mercado con relación al 2007 a raíz de la crisis financiera mundial, según un informe de la consultora Economática. Los datos revelan que 332 empresas que integran la Bolsa de Valores de Sao Paulo (Bovespa) registraron en conjunto pérdidas equivalentes a 405.500 millones de dólares como consecuencia del derrumbe de sus acciones, pese a que todas obtuvieron importantes beneficios en los primeros nueve meses del año.