CIPOLLETTI (AC).- Este es el "Día D" en la embestida municipal para preservar el medio ambiente donde se pondrá en juego la responsabilidad de los empedernidos amantes de cigarrillos, cigarros y pipas para no incumplir las reglas vigentes. Desde las cero de esta jornada de lunes comienza el "aire puro" en Cipolletti, pues los fumadores que quieran ingresar a algún lugar cerrado con acceso público deberán apagar su cigarrillo en la puerta. Comienza a regir la ordenanza municipal "espacios 100 por ciento libres de humo de tabaco" después de casi tres meses de sancionada por el Concejo Deliberante.
El período destinado a concientizar e informar a la población sobre los alcances de la norma, finalizó y sólo queda adaptarse a las nuevas disposiciones que incluyen multas que van entre 700 y los 18.000 pesos en casos de reincidencia. También se prevé la clausura de los locales en donde se viole la prohibición de fumar. Hasta el momento, desde la municipalidad rescataron "la muy buena predisposición" de los comerciantes hacia la medida. En estas últimas semanas fueron notificados de la entrada en vigencia de la ordenanza que tiene como objetivo "la salud de la población y no la prohibición de fumar", según el presidente del Concejo, Abel Baratti.
"Nosotros no le decimos a nadie que no tiene que fumar, sólo establecemos los lugares en dónde no se puede", aclaró.
A nadie escapa que los espacios donde mayor cantidad de conflictos se pueden suscitar son las confiterías, los pubs, restaurantes y locales bailables. Muchos ya están pensando en sacar sillas y mesas a la calle para evitar la pérdida de clientes.
Sin embargo, desde el área de comercio adelantaron que también comenzarán los controles sobre el uso de los espacios públicos para evitarle inconvenientes a los peatones.
Roberto Bichara responsable del sector sostuvo que "los comercios deberán dejar como mínimo un espacio libre de 1,50 metros desde la pared para garantizar la correcta circulación de las personas".
Uno de los aspectos que siempre generó más debate fue que las mayores sanciones recaen sobre los comercios. La medida está justificada en que de esta manera es posible que sea efectivamente cumplida ya que transforma el comerciante en un ente fiscalizador. Sin embargo, en caso de que algún fumador no quiera dejar de hacerlo en esos espacios se puede realizar una denuncia telefónica al 0800-999-0130 y evitar de esta manera ser sancionado.