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"Es hora de que comiencen a parar esta locura” | ||
Por mi trabajo recorro semanalmente la Ruta 22 desde Plottier hasta Chichinales. Ya se ha convertido en una tortura mental ver accidentes como si fueran parte del paisaje. Realmente me siento cansado; cansado de ver la sobrecarga de vehículos que circulan a diario por esta vía, de ver que las autoridades no hacen nada, de escuchar discusiones sobre si la ruta debe ser ensanchada o no, si se debe hacer sobre la barda norte o la sur... mientras la gente sigue muriendo en incontables accidentes. Cada vez que sucede una tragedia aparece la misma solución de siempre: policías sobre la ruta cada 5 ó 10 minutos de viaje, cosa que en realidad me causa gracia porque segundos después de pasar los puestos de control vuelven el caos y la locura, incrementados además por las largas caravanas a que da lugar el descenso de velocidad de los vehículos y la lógica intención de quienes pretenden recuperar el tiempo perdido y no pueden hacerlo a raíz de las interminables filas de autos... además de compadecer al pobre agente que tiene que respirar el monóxido de los escapes y sufrir la intemperie y las inclemencias del tiempo. Esto sólo sirve para detectar algún vehículo con irregularidades de documentación, pero nada se puede hacer con los que encandilan, con los que viajan a velocidades extremas o con los que lo hacen demasiado despacio, con camiones que no tienen paragolpe o si no lo tienen demasiado alto al igual que camionetas 4x4 -con el riesgo de decapitar al conductor de un vehículo menor que esto acarrea-, con quienes viajan con neumáticos lisos, etcétera, etcétera. Lógicamente, para todo esto existe la revisión técnica que es obligatorio realizar una vez por año. Pero la realidad demuestra que no sirve, ya que los vehículos que circulan de forma irregular siguen haciéndolo de forma abrumadora por estas rutas. Es necesario detener a los vehículos que circulan con luces altas en forma permanente, con neumáticos lisos y con paragolpes más altos que lo normal o con una altura que no puede contener a un automóvil por debajo de su frente de contacto. Además, el gobierno de la provincia debería prever que patrullas recorran las rutas y den aviso a las camineras al momento de detectar las infracciones: esto es imprescindible si se quiere que se reduzca la velocidad de desplazamiento de algunos conductores. Creo que uno de los inconvenientes que siempre se han planteado para poner patrullas en las rutas es el costo en combustible que demandarían pero, si no me equivoco, hoy se deben estar gastando fortunas en ambulancias e insumos hospitalarios y en horas-hombre de Salud, policía y bomberos. Estoy totalmente convencido de que poner patrullas sobre la ruta sirve, porque muchas veces he visto que cuando circula un móvil policial a la velocidad máxima (110 km/h), son pocos los que se atreven a adelantarse y cuando lo hace uno, lo hacen todos. Por otra parte, para cuando se termine el ensanchamiento de la ruta, totalmente necesario, ésta va a estar desbordada nuevamente; considero que ya debería estar estudiándose una nueva alternativa. Espero que tanto el gobernador como el ministro de Gobierno tomen la iniciativa y comiencen a resolver esto de una vez por todas, que comiencen a parar esta locura que vemos permanentemente sobre las rutas del Valle.
Jorge Luis Figueiras DNI 14.098.759 Cipolletti | ||
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