ZAPALA (AZ).- La nena se levantó temprano y pidió salir a jugar a la vereda, como todos los días. Su abuela la acompañó pero enseguida entró nuevamente a la casa para preparar el mate. Fue la última vez que la vio con vida.
Siomara Calfinahuel apareció muerta poco después en una meseta ubicada a 250 metros de su hogar. Una jauría de perros hambrientos despedazó su cuerpito y le provocó un shock hipovolémico.

Este lunes se cumplen dos meses de la tragedia que sacudió a esta ciudad y abrió una herida imposible de cerrar. Los investigadores, que mantienen la causa abierta a la espera de la llegada de nuevas pericias, confirmaron el motivo del deceso y revelaron que casi medio centenar de personas desfilaron por el juzgado para aportar su relato.

A pesar de que ninguno de ellos pudo confirmar la presencia de algún adulto junto a a la pequeña Siomara en el momento del ataque, la familia de la criatura mantiene sus dudas.

"Vamos a agotar todas las instancias antes de cerrar la causa, ahora aguardamos la llegada de una serie de estudios y siempre estamos abiertos a escuchar nuevos testigos", aseguró una voz cercana al fiscal Marcelo Jofré.

De acuerdo con la hipótesis oficial, Siomara, de dos años, caminó dos cuadras desde su casa hasta el borde de la barda supuestamente siguiendo un grupo de caballos que llamaron su atención. En el descampado fue atacada por un grupo de perros que en pocos minutos le causaron la muerte.

Cuando la abuela se percató de la ausencia de la niña dio aviso a la Policía y se montó un operativo de búsqueda que terminó casi dos horas después con el hallazgo del cuerpo.

Cuando los efectivos se acercaron a la escena tuvieron que arrojar piedras contra uno de los animales que todavía estaba encima del cuerpo de Siomara.

La abuela, María Mardónez, aseguró enseguida que la chica no pudo haberse ido sola hasta el lugar donde fue atacada. Los vecinos del barrio armaron varias marchas de reclamo y exigieron justicia advirtiendo sobre la supuesta participación de un sujeto.

Sin embargo, con el correr de las horas esta teoría fue perdiendo fuerza. Desde la fiscalía se informó que la autopsia desechó la posibilidad de un abuso sexual y confirmó que el motivo de la muerte fue el shock hipovolémico.

Nuevos estudios

"Queremos saber si la niña presentaba algún tipo de lesión interna que pudiera encaminar la pesquisa en otro sentido", reveló ayer uno de los investigadores mientras esperaba por la llegada de los nuevos estudios.

"Se escuchó a todos los que vieron algo o pudieron aportar datos pero en ningún lado surge la participación de otra persona" explicó el vocero.

La causa seguirá abierta hasta que se sumen estos análisis y se descarte definitivamente cualquier otra hipótesis.