NEUQUÉN (AN) - El tratamiento de la obesidad, la bulimia y la anorexia se podrá hacer en forma gratuita en los centros de atención de salud pública y a través de la obra social provincial y las prepagas. El miércoles la Legislatura sancionó, por unanimidad, la norma que caracteriza a estos trastornos alimenticios como enfermedad y consecuentemente garantiza su detección, prevención y tratamiento.

"Con la norma se responde a una amplia franja de la sociedad que venía reclamando este servicio. Hasta el momento se garantizaba la atención de otros trastornos alimentarios y no la obesidad, que en la gran mayoría de casos la ocasionaba", dijo la diputada Jenny Fonfach (UCR), impulsora de la iniciativa.

En diez días el Poder Ejecutivo podrá objetar y plantear una eventual modificación o vetarla y a partir de ese plazo en 90 días deberá estar reglamentada y habilitada su implementación.

"Se trabajo mucho en la comisión y finalmente, con la sanción de una ley que aborda la misma problemática por el Congreso, se optó por adherir a la normativa nacional", señaló la legisladora.

El órgano de aplicación será la subsecretaría de Salud, que a su vez en coordinación con otros organismos del Estado -de Desarrollo Social, Educación-, habrá de coordinar programas de complementación que irán desde la capacitación de profesionales y técnicos a la difusión.

"En el país hay más de 20.000.000 de personas con sobrepeso y un gran porcentaje de ellos son niños y adolescentes, por lo que puede contemplarse la proyección y la magnitud del problema a futuro", dijo la diputada al momento de fundamentar el proyecto. Respecto de la bulimia y la anorexia Fonfach destacó que "uno de cada 25 chicos padece uno de estos trastornos y de ellos un 15% muere".

En Neuquén no hay cifras sobre enfermedades derivadas de la mala alimentación, pero se da por sentado que no escapa -proporcionalmente a la población- a las estadísticas nacionales.

"Uno de los artículos de la ley apunta a este aspecto: indica la necesidad de implementar sistemas estadísticos que permitan hacer un mapa sanitarios en todo el ámbito provincial", dijo la legisladora neuquina de la Concertación.

Fonfach comenzó a ocuparse del problema cuando en su condición de funcionaria de esta ciudad -en el Acción Social- donde trabajó en la implementación del plan "Comer en casa".

"Uno de los lugares donde se detectó el problema de la bulimia y la anorexia fueron las escuelas y lo grave, lo llamativo, era que se asumía como un trastorno menor, de resolución sencilla", cerró.