ROSARIO.-La empresa General Motors acató ayer la conciliación obligatoria decretada por el Ministerio de Trabajo de Santa Fe, por lo que dio marcha atrás con unos 500 despidos de la planta de Rosario.

A través de un comunicado, la empresa señaló que "está buscando un ámbito de diálogo con los sindicatos para encontrar una solución".

La automotriz agregó que "el Ministerio de Trabajo está brindado ese espacio y procedimos a acatar la conciliación obligatoria dispuesta por este cartera" e invitó a "los líderes sindicales del SMATA a buscar una solución".

Por otro lado, voceros de la empresa confirmaron a DyN que la firma dispondrá desde el próximo lunes un freno de su planta por una semana, tal cual ya había sido informado con anterioridad.

Por la mañana, el secretario gremial de SMATA, Gabriel Bienucci, denunció que la empresa General Motors había enviado 500 telegramas de despido a trabajadores de la planta industrial que la compañía tiene en la localidad santafesina de Alvear, 15 kilómetros al sur de Rosario.

En declaraciones formuladas a la radio rosarina LT8, Bienucci dijo que "la empresa nos comunicó por vía telefónica que iba a mandar 500 telegramas de despido".

"No tenemos mucho por decir, esto nos ha sorprendido. Actuaron de muy mala fe. Es inaudito e incompresible que se tome esta determinación. No sé qué van a aducir pero estamos en esto", agregó.

Consultado sobre si los argumentos de la empresa estarían vinculados a la caída de ventas en el mercado interno e internacional por la crisis financiera global, o a raíz de un conflicto iniciado tras el despido de un trabajador, Bienucci aseguró que "ellos van a mechar las cosas".

"Conflicto sostenido"

"Van a aducir que hay caída de ventas pero la verdad es que hay un conflicto gremial sostenido que ellos estaban perdiendo, en el sentido de que hay una conciliación obligatoria por el caso de un compañero que había despedido y metieron todo en la bolsa", consideró.

El dirigente gremial agregó que la compañía "pasó por arriba al Ministerio (de Trabajo). Estamos más que preocupados, estamos decepcionados porque el accionar de la empresa es de muy mala fe, además consideramos que entre el grupo de despedidos hay 200 efectivos, 200 contratados y 100 eventuales.

Ahora iremos al ámbito nacional y tomaremos la planta", advirtió, antes que se conociera la decisión empresaria de acatar la conciliación y, en consecuencia, dar marcha atrás con los despidos. (DyN)