Identificar a los grupos con un género musical determinado puede ser sólo una cuestión de ordenamiento, o simplemente puede ser un capricho y así como en muchas oportunidades sirve decir si está dentro de los grupos folclóricos, en este caso no servirá de nada encasillarlos. Simplemente porque son una especie de exponentes universales de la música. Para mi modo de ver tienen mucho de folclore, pero no todo lo que hacen está dentro de este género.

Cuarenta años cumple Opus Cuatro, grupo plenamente identificado con la buena música del país, exponentes de esta Argentina generadora de talentos, de esta Argentina cargada de cultura. Bien se podría decir que son los señores de la música, verdaderos señores a la hora del escenario, a la hora de la profesionalidad y por esa misma razón, no es casual que lleguen a los 40 años con éxitos plenos.

No cualquiera llega a este tiempo con tanto para ofrecer, con caminos llenos de aplausos cosechados por años. Dijimos que Los Carabajal alcanzaron semejante privilegio, Los 4 de Córdoba están a punto de cumplirlos y Opus Cuatro está de festejo en festejo.

Sin estridencias, con el gran capital de voces privilegiadas, con la seriedad de hombres de palabra y mucho empeño, esta agrupación se instaló entre los orgullos de la Argentina. ¿De dónde son? Mire, bien se los podría definir como argentinos, es lo que mejor les queda, porque cuando los exponentes por excelencia trascienden como ellos trascendieron, poco importa el origen. Lo dije hace poco con Mercedes Sosa, que nunca dejará de ser tucumana, pero cuando alguien la quiere identificar sólo le pone el sello del país. Opus Cuatro surge en el año 1968 cuando Antonio y Lino Bugallo (tenor y barítono), Federico Galiana (bajo) y Alberto Hassan (tenor), se desprenden del Coro Universitario de La Plata y apuestan a Opus Cuatro.

Antonio y Lino Bugallo dejaron la agrupación y en su lugar ingresaron Marcelo Balsells (tenor II), quien llegó en 1984 y Hernando Irahola (última incorporación), para agregarse a sus fundadores, Hassan y Galiana.

Sólo para tener una idea de lo que hicieron, Opus Cuatro tiene para mostrar más de 7.000 conciertos en 34 países de Europa y América, todo a lo largo de estos 40 años.

Será un festejo con lo que mejor hacen, con música y canto, un festejo que es nada menos que una especie de balance de lo recorrido, una suma de éxitos, coronados en los países más exigentes del mundo por su buena música y la calidad de los exponentes. A tal punto que 40 años después de recorrer el mundo, siguen su camino y apenas terminados los festejos, en noviembre próximo, pondrán en marcha una gira por Europa y los Estados Unidos.

Ellos mismos cuentan que no imaginaban semejante trayectoria, que no sólo se limitó a su propio país, sino que pronto tomo carácter internacional, porque llegaron las convocatorias de los sitios más exigentes del mundo, todos querían tenerlos en su momento de apogeo, disfrutar de su música que nadie se atrevió a encasillar. Es más, tuvieron siempre la capacidad de acomodar el repertorio a las exigencias del público donde se presentaran.

Desde aquel primer disco "América" para el sello Trova, hasta el último que van a grabar, pasaron estos 40 años de éxitos, nada fácil, con la complejidad de cada momento, pero con la respuesta profesional siempre en primer plano. Eso es lo que marcó la trayectoria, éxitos continuados y tiempos duros que también cuentan en el balance, pero que es altamente positivo.

Son los hombres del tango, del jazz, del folclore, mejor dicho, son los hombres de la música y el canto, de esos que se puede estar orgulloso.

JORGE VERGARA

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