NEUQUÉN (AN).- La Justicia neuquina allanó el camino para que dos niñas puedan ser educadas dentro de su grupo familiar, a partir de un pedido de sus padres, que alegaron que serán los encargados de instruirlas por no estar de acuerdo con el sistema escolar formal.

El dictamen de la Cámara Civil llegó tras sucesivos pedidos de la Defensoría del Menor y el Adolescente, a cargo de Nara Osés, que consideró que el hecho de que las nenas no fueran a la escuela implica una desprotección de derechos establecidos constitucionalmente. Según consta en el expediente judicial al que accedió este diario, el padre de las niñas participó de una reunión con la Defensoría. Allí dijo que su esposa se encargaría de educar a sus dos hijas, dentro del hogar familiar. Para eso dio la razón de que no acuerdan con la educación en el sistema formal. Dijo que para darles clase se valdrían de "una serie de programas y contenidos de aprendizaje que aplican junto a otras familias".

En el Consejo Provincial de Educación informaron que no estaban al tanto de este pedido en particular, pero que sí habían recibido otro, de una familia agnóstica, que reclamaba lo mismo para un niño (ver aparte). Sostuvieron que el de las niñas podría ser otro caso similar, algo que este diario no pudo confirmar.

El caso llegó a la Cámara luego de que no prosperaran dos solicitudes de la Defensoría, convocada por una escuela primaria que alertó de la situación.

En el fallo, los jueces Isolina Osti de Esquivel y Fernando Ghisini sostienen que el decreto reglamentario de la ley 242, creadora del CPE, establece que los padres pueden elegir dónde quieren que estudien sus hijos: en escuelas públicas, privadas o en sus propios hogares. Para este último caso, el decreto dice que "los responsables probarán el hecho (de que estén estudiando en casa) ante las autoridades escolares respectivas", y el organismo educativo "determinará los medios de control de esta enseñanza y fijará el sistema para su reconocimiento y certificación".

En el CPE indicaron que no existe programa que pueda atender alumnos cuyos padres peticionen tal modalidad. Un sistema así sólo funciona para niños con capacidades diferentes y para los que presenten un certificado de enfermedad prolongada.

Por otro lado señalaron permitir la educación dentro del hogar para un niño sin limitaciones de ningún tipo, contrasta con la ley de Educación nacional. Además señalaron que la reglamentación de la 242 atendió problemáticas educativas que quedaron desactualizadas en la provincia, como la falta de maestros hace muchos años.

El polémico fallo plantea que "es facultad de los padres la elección del tipo de enseñanza que deben recibir sus hijos y quien debe brindar los medios para que ello se haga efectivo" es el CPE.