CIPOLLETTI (AC).- El comentario desde el miércoles es que la pericia de ADN que se realiza por el caso Otoño Uriarte está "para la firma" en Buenos Aires. Pero las horas pasan, el informe no llega y las expectativas crecen.
Este estudio es fundamental en la causa porque permitirá ratificar o debilitar aún más la principal línea de investigación que sigue la jueza María del Carmen García García, que centra sus sospechas en Ricardo Néstor Cau, Angel Germán Antilaf, José Iram Jhaffri y Maximiliano Lagos.
El examen se realiza a restos orgánicos encontrados en el vello púbico de la menor de 16 años de Fernández Oro.
Los investigadores tomaron muestras de sangre a los cuatro imputados -que fueron liberados hace pocos días por resolución de la Cámara Primera- porque sospechan que esos restos podrían corresponder con alguno o algunos de ellos. Por eso hay expectativas; tanto de quienes siguen la línea "oficial", como de la defensa, que entiende que si esta prueba llega con resultado negativo será una forma de desvincular mucho más a los imputados que actualmente están libres por falta de mérito.
En tanto, una nueva pericia se hará próximamente. Es a raíz de una prueba odorológica que se realizó en un Fiat Duna blanco que habría sido utilizado hace tiempo como taxi y que fue secuestrado hace unos días.
"Corbata", el perro que la Policía provincial utiliza para pericias odorológicas "marcó" este vehículo siguiendo aparentemente el olfato de la menor. Por eso decidieron ahondar en la búsqueda. Pretenden que en Buenos Aires se efectúen estudios de ADN y que traten de hallar "cualquier indicio de interés".