SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El conflicto desatado en el barrio Omega II, paralizado por el reclamo de mayores costos que sostiene la contratista Srur-Srur, puso de manifiesto el fuerte atraso que arrastra la Nación en la inversión comprometida para viviendas.
La diferencia de unos 2.500.000 pesos reclamada por la constructora, representa casi un 20 por ciento del presupuesto aprobado en la licitación de 2005 para el plan de 134 viviendas sociales impulsadas por el gremio de la construcción bajo la modalidad de consorcio.
Tras la adjudicación a la firma valletana el proyecto habitacional sufrió un sinnumero de inconvenientes que mantuvo paralizado el inicio de obras hasta setiembre de 2007.
La empresa pidió una adecuación presupuestaria en atención al aumento de insumos y mano de obra registrado en ese lapso, que el IPPV se negó a reconocer si no hay una aceptación de Nación, provocando una nueva paralización de los trabajos y la cesantía de un centenar de obreros.
El secretario General de la Uocra en Bariloche e interventor en Neuquén, Víctor Cárcar, explicó a "Río Negro" que informalmente el subsecretario de Viviendas de la Nación prometió un reconocimiento a futuro que Gonzalo Srur se niega a aceptar sin garantías.
Desconfianza
Cárcar justificó la desconfianza en los incumplimientos de la Nación que "hace dos años que no le está pagando a nadie" y reconoció que existe una preocupación generalizada entre las constructoras y la dirigencia sindical por las demoras de los planes Federal I y II. "Nación no está pagando a nadie y a todos le dicen que sigan que van a reconocer pero las actualizaciones las hacen de acuerdo al Indec", dijo.
El sindicalista recordó que la deuda acumulada por el gobierno Nacional en obra pública impaga -en todo el país- supera los 4.500 millones de pesos y que la consecuencia inmediata de esa demora es la pérdida de 60.000 puestos de trabajo en los últimos dos meses.
No obstante consideró que la mayor responsabilidad en el conflicto del plan habitacional Omega II corresponde a la provincia por las sucesivas demoras que impuso el replanteo urbanístico del barrio tras la licitación. "La única forma de destrabarlo es un arreglo entre IPPV y empresa que tendría que absorberlo la provincia", sostuvo.
El consorcio de 134 viviendas de la Uocra fue el primer proyecto presentado al Plan Federal I y, contradictoriamente fue el último licitado por el IPPV. Las construcción de las unidades habitacionales fue acordada entre el gremio y el Instituto provincial en agosto de 2004 y debieron entregarse en noviembre pasado de 2006.
La provincia tardó un año en licitar las obras y recién formalizó la adjudicación en febrero de 2006. Como si no fuera suficiente contratiempo esa demora, los trabajos quedaron supeditados a la aprobación de planos del municipio y el permiso de obras de la provincia.
Tramitaciones que se vieron alteradas por la modificación del plan vial para ese sector de la ruta de Circunvalación que obligó a replantear el loteo, pagado en su totalidad por los beneficiarios.
