NEUQUÉN (AN)- El fiscal Santiago Terán pidió ayer prisión perpetua para Andrés Muñoz, quien el 10 de enero pasado asesinó a puñaladas en El Chocón a Manuel Bustingorry. Lo acusó de homicidio cometido "con alevosía" porque la víctima ni se esperaba el ataque. En cambio el defensor Juan Carlos Ríos Iñíguez pidió el mínimo de la pena por "emoción violenta". La sentencia la dictará la Cámara de Cutral Co el viernes próximo.
A la audiencia de ayer concurrieron familiares de la víctima y del acusado, que se trenzaron en una fuerte discusión durante un cuarto intermedio. La importante presencia policial impidió que los incidentes pasaran a mayores.
Los alegatos, que demandaron unas tres horas, fueron el cierre del juicio oral en el que se presentaron 28 testigos por el crimen que sacudió a El Chocón el último verano.
Las declaraciones permitieron conocer lo sucedido antes y después del crimen, así como reconstruir el momento del ataque porque fue delante de otras personas, entre ellas dos médicos.
Al parecer Muñoz atacó a Bustingorry, hijo de la familia fundadora de la ciudad, cuando se enteró que había iniciado una relación con su ex mujer, de la que estaba separado hacía meses.
Incluso la siguió en alguna oportunidad para confirmar que pasaba la noche junto a quien sería la víctima.
El día del hecho Muñoz le dio una terrible paliza a su ex mujer y luego fue a buscar a Bustingorry. Lo encontró en el hospital, dentro de un consultorio, donde una médica lo atendía por una dolencia.
Según los testigos que declararon en el juicio, Muñoz ingresó y sin mediar palabra se arrojó sobre Bustingorry, que estaba acostado en la camilla.
La médica que presenció la escena creyó que lo estaba abrazando, como en un saludo, cuando de pronto vio que el imputado tenía en su mano un cuchillo de carnicero que le clavó dos veces en la espalda a la víctima.
La profesional salió del consultorio corriendo y pidiendo ayuda a los gritos. Otro médico ingresó y presenció el momento en que Muñoz apuñalaba a Bustingorry dos veces más, ahora de frente.
Según la autopsia, una de esas puñaladas seccionó la aorta de la víctima y le causó la muerte en menos de dos minutos por la brutal hemorragia. La otra interesó un pulmón.
Después, Muñoz se entregó a la policía sin ofrecer resistencia. Desde ese día está detenido.
El fiscal Terán entendió que Bustingorry estaba indefenso cuando sufrió el ataque, que además lo tomó por sorpresa y por eso pidió la máxima pena por homicidio con alevosía.
En cambio Ríos Iñíguez argumentó ante el tribunal que su defendido actuó en un estado de "emoción violenta", y pidió el mínimo de la pena para ese delito.
Al estar probado que Muñoz fue el autor, la cuestión que queda a resolver es justamente la figura penal y la sanción que corresponde aplicarle.
Los jueces Lelia Graciela Martínez de Corvalán, Dardo Troncoso y Pablo Furlotti dictarán sentencia el viernes próximo al mediodía.