NEUQUEN (AN/ACE).- El juez federal Guillermo Labate indagó en Bahía Blanca al militar (re) Osvaldo Laurella Crippa, acusado de ser "partícipe necesario" en 12 secuestros y desapariciones durante la última dictadura militar.
Laurella Crippa era teniente coronel en 1976 y antecedió en el cargo a Oscar Lorenzo Reinhold, como jefe de Inteligencia del Comando; pero a partir del 24 de marzo, con el golpe, se puso al mando de la jefatura de policía neuquina.
El juez lo responsabilizó penalmente por haber ordenado la "zona liberada" para que se llevaran a cabo los secuestros ilegales, haber dispuesto las comisarías de la provincia de Neuquén para que funcionaran como centros de detención ilegal y torturas, y haber aportado los medios y hombres de la policía provincial para que se concretaran los secuestros ilegales.
Según dijo el juez Labate ayer, ésta sería una de sus últimas intervenciones en la causa en la que se investigan los delitos de lesa humanidad denunciados ante el juzgado federal, en tanto estimó que antes de asumir en el Tribunal Superior de Justicia, la situación procesal del militar indagado en Bahía, estará definida.
El 12 de septiembre pasado, Labate procesó a 27 militares de inteligencia, agentes civiles de inteligencia (como Raúl Guglielminetti) y comisarios retirados de la policía que están acusados por las denuncias de 39 víctimas de secuestros y desapariciones.
El "megaprocesamiento" fue apelado y está a la espera de una definición de la Cámara Federal de Apelaciones de Roca, en tanto la indagatoria de Laurella Crippa se encuadró en el mismo grupo de víctimas en investigación que están a la espera de una definición de la Cámara de Roca.
La indagatoria en Bahía se cumplió con la participación de la secretaria del juzgado, Silvina Domínguez y la defensa oficial de Laura Giulliani.
El acusado se mostró nervioso y luego de escuchar las acusaciones en su contra, no declaró. Había un médico para el control cardíaco, pero no se descompensó durante el trámite judicial.
Se lo indagó por 12 denuncias de tormentos, privación ilegítima de la libertad agravada y asociación ilícita calificada. Tres de los hechos que se le imputan, corresponden a desaparecidos.
Entre otras responsabilidades, se le atribuyó participación necesaria en los hechos ocurridos en Cutral Co y el barrio Sapere de Neuquén, cuyo resultado fue el secuestro masivo de personas, envío a centros clandestinos de varios de los detenidos ilegales y la desaparición de personas.
Laurella Crippa había sido detenido en julio pasado, cuando se produjo la ronda de indagatorias que luego derivó en el "megaprocesamiento" de 27 involucrados en delitos de lesa humanidad.
Pero cuando fue notificado sufrió una descompensación cardíaca y quedó alojado durante varios días en el hospital militar de Bahía Blanca.