Arrancó como para golear pero el excelente juego del principio se fue diluyendo hasta terminar con una victoriajusta, pero apretada, de 2-1 sobre Uruguay. El triunfo le bastó al seleccionado argentino para terminar con una racha negativa de cinco partidos sin triunfos en Eliminatorias.
Argentina mostró, sobre todo en el principio, una actitud de ir al frente y tratar de tocar la pelota, a partir de los cuatro hombres de arriba (Riquelme, Tevez, Messi y Aguero). Lo negativo es que la defensa mostró otra vez flaquezas, sobre todo en el sector izquierdo entre Martín Demichelis y Gabriel Heinze.
El partido tuvo sabor a clásico rioplatense y predominó la fricción en el juego. El equipo de Basile presionó y forzó al error de los uruguayos y el gol que consiguió tempranamente Messi parecía que dejaba servicio para la gran producción. Los albicelestes jugaron con cuatro defensores, con Mascherano y Cambiasso en la contención del medio, Riquelme como generador de juego, con Messi por derecha y Tevez por izquierda y con Aguero como único delantero de punta.
El primer gol llegó a partir de la lucha de Tevez. Carlitos buscó el espacio por izquierda, le bloquearon el tiro, pegó en el árbitro y la pelota le quedó justa para Riquelme, quien cruzó la pelota para sacar provecho de una entrada en diagonal de Messi, que cabeceó al gol.
El entusiasmo de Argentina creció cuando a los 12 minutos un centro de Tevez desde la izquierda fue conectado limpiamente por Cambiasso, el remate dio en el palo derecho del arquero y el rebote lo contestó Aguero, de primera, marcando el segundo.
Con el 2-0 parecía que todo estaba para Argentina, pero Uruguay encontró solidez de atrás hacia el medio y empezó a mostrar réplicas y a desnudar falencias en el fondo de Argentina, especialmente en el sector izquierdo, entre Heinze y Demichelis. Por allí llegó el descuento de Uruguay, a partir del esfuerzo de Luis Suárez que en vez de esperar que la pelota se vaya al corner la corrió y lanzó un centro rasante que Lugano tocó al gol para el 1-2.
En el segundo tiempo el futbol perdió nivel, a medida que se sucedía la pierna fuerte. Lo más claro en el segundo fue una buena jugada de Riquelme con Messi, que quedó para Aguero, que quiso cruzarla ante la salida del arquero Castillo pero se fue desviado. Ahora, Argentina deberá ir a Santiago para enfrentar, el miércoles, al Chile de Bielsa.