NEUQUÉN (AN).- Entre 4.000 y 10.000 pesos, en promedio, es lo que debe pagar un comerciante en seguridad ni bien padece un robo. La inversión incluye alarma, cámaras de seguridad, rejas, persianas ciegas, seguro, vigilancia privada o adicionales de la policía, según surge del detalle brindado por recientes víctimas de asaltos.

Sufrir un robo por estos tiempos requiere de reflejos ya que no se puede permanecer molesto mucho tiempo porque hay que adecuar rápidamente las medidas de seguridad para evitar otro golpe.

La casa de artículos de limpieza Caromar, tras el robo de 140.000 pesos de abril pasado tuvo que desembolsar, "cerca de 4.000 pesos en cambiar el sistema de alarma, agregamos sensores y hasta personal de seguridad que nos cuesta unos 5.000 pesos por mes", confió Hernán Ulloa, encargado de Caromar

Armando Goldenberg, titular de la Farmacia Neuquén, padeció de un boquete en mayo por el cual le llevaron entre efectivo y mercadería más de 26.000 pesos.

"Después del robo puse un sistema de monitoreo por lo que invertí no menos de 10.000 pesos pero nunca sabes hasta que punto sirve esto porque los delincuentes pareciera que están siempre un paso más adelante", confesó el hombre.

A la talabartería El Mirador, ubicada en calle Corrientes al 300, los delincuentes le forzaron la puerta principal en julio pasado y les llevaron unos 250.000 pesos en mercadería. Rita Jara, su propietaria, cuenta que "me salió unos 250 pesos restablecer la alarma porque la habían destruido. Ahora queremos poner una persiana ciega que nos sale 7.000 pesos", detalló la mujer que decidió contratar junto con otros tres comerciantes servicios adicionales a la policía.

Más de 300.000 pesos en mercadería le llevaron a principio de septiembre al Centro de Pesca, ubicado en calle Láinez. Tras lo que fue el robo más grande en lo que va del año, Diego Rodríguez uno de sus propietarios debió invertir, "sólo en cámaras y una computadora unos 5.400 pesos". Además debieron cambiar la central de la alarma, despedazada por los delincuentes, que rondó los 1.200 pesos porque es inalámbrica.

Andrés Mirantes padeció dos robos en menos de seis meses en su ciber ubicado en Sarmiento y Leguizamón. Para protegerse tuvo que colocar un circuito cerrado de cámaras que le costó 3.500 pesos. Además entre varios comerciantes están pagando servicios a un guardia de seguridad privada que les cobra 20 pesos por comercio el turno de 4 horas.

En tanto, Daniel Dalla Torres, que tiene su casa de computación

en calle Belgrano frente a Casa de Gobierno, fue robado en dos ocasiones en menos de cinco meses. Entre rejas, alarma, cámaras de seguridad, seguro y monitoreo debió desembolsar alrededor de 10.000 pesos.

A esto el hombre le debe agregar que mensualmente debe pagar 500 pesos de seguro y 150 pesos por el sistema de monitoreo.