VIEDMA (AV)- Menos muertes pero más vuelcos en casi la misma cantidad de accidentes. Estos datos señalan las estadísticas viales registradas en el operativo "Amancay" implementado por primera vez en todas las rutas rionegrinas durante el invierno -entre el 30 de junio y el 15 de setiembre-.

La mayor cantidad de vuelcos y de víctimas fatales se produjeron en la ruta nacional N° 251 y en el tramo entre Río Colorado y San Antonio Oeste. Según las estadísticas de Tránsito en estos mismos meses de invierno de 2007 se produjeron 48 accidentes en los que perdieron la vida 26 personas, cinco de ellas niños, otras 39 sufrieron lesiones graves y 46 leves. En esos mismos meses de este año se registraron 50 accidentes en las rutas rionegrinas. En ellos murieron 16 personas, sólo una de ellas menor de edad, mientras que 38 debieron ser hospitalizadas con lesiones graves y las restantes 51 sufrieron heridas leves. De estos 50 accidentes 22 fueron vuelcos. Desconocimiento de las rutas, desarrollo de alta velocidad y el mal estado del mantenimiento de las banquinas fueron consideradas como las principales causas de estos hechos por el jefe de Tránsito de Viedma el comisario Félix Pérez.

De acuerdo a las pericias realizadas se pudo establecer que el mal estado de las banquinas provocó que cuando un conductor mordió esa área paralela a la ruta "no tuvo la posibilidad de retomar la circulación más estable sobre la cinta asfáltica sino que directamente volcó, explicó al referirse a lo ocurrido en la mayoría de los casos.

Pero también aclaró que los vuelcos se produjeron cuando el conductor había superado la velocidad máxima permitida de 120 kilómetros por hora, circunstancia que aumenta los riesgos del impacto para los ocupantes del vehículo. Y destacó que si en estas oportunidades "la tota

lidad de los ocupantes de los vehículos hubieran llevado colocado el cinturón de seguridad se hubieran salvado más personas". En este invierno -comparado al del año pasado- se modificó también el horario de ocurrencia de los accidentes que se produjeron, en su gran mayoría entre las seis de la mañana y el mediodía, según detalló Prez. En 2007 la mayoría ocurrió entre las 12 y las 18.

En la cordillera

En las rutas cordilleranas, las más transitadas durante el invierno, disminuyeron notablemente los accidentes -sólo tres- comparados con el año pasado y no se registró ninguna víctima fatal este año; mientras que en los meses invernales de 2007 murieron ocho personas en rutas de la zona andina.

Consultado Pérez sobre si la menor ocurrencia de accidentes de tránsito pudo deberse a una baja de la afluencia turística, teniendo en cuenta la falta de nieve al inicio del invierno y las cenizas del Chaitén sostuvo que la concurrencia fue semejante a la del año pasado pero no coincidió con los mismos meses sino que hubo un corrimiento. En años anteriores este operativo de tránsito sólo era implementado en la cordillera pero este año el plan diagramado por Tránsito de la Policía incluyó a toda la provincia.