El juez federal Norberto Oyarbide sobreseyó a un ex miembro del Servicio Penitenciario Federal (SPF) investigado como presunto apropiador de bebés porque se comprobó que su hijo era propio y no de desaparecidos durante la dictadura militar.
Fuentes judiciales indicaron que la resolución adoptada por el juez desvinculó de la causa a Carlos Ángel Mancuso, sobre quien pesaba una investigación penal promovida por la organización Abuelas de Plaza de Mayo. La causa se inició a raíz de que la titular de Abuelas La Plata, Jorgelina Azzarri de Pereyra, suponía que el hijo de Mancuso, Ignacio, era en realidad su nieto.
Ignacio Mancuso se sometió a un examen genético que arrojó como resultado un lazo de sangre con sus padres, Carlos Ángel y Dora Ignacia Jiménez, del 99,9999999 por ciento.
Las Abuelas objetaron que el estudio no se hubiera realizado en el Banco de Datos Genéticos (BNDG) que funciona en el hospital Durand de la Capital Federal, tal como lo establece la legislación vigente en materia de derechos humanos.
Mientras se desarrollaba la causa, Azzarri de Pereyra halló a su verdadero nieto, que no era Ignacio Mancuso. En virtud de esa situación, Mancuso fue sobreseído por el juez federal Oyarbide.