Aferrado a la ventaja mínima conseguida en La Plata, Estudiantes pasó a cuartos de final de la Copa Sudamericana tras empatar sin goles, anoche ante Arsenal en Sarandí. El 2-1 de la ida le permitió conseguir en el estadio "Julio Grondona" la otra mitad del pasaje copero. Su rival será el Botafogo de Brasil.
La lógica indicaba que Arsenal debía ser el equipo que tomaría la iniciativa del juego. La derrota en La Plata (1-2) obligaba a los de Sarandí a ganar, pero fue Estudiantes quien propuso juego. Replegado sobre tres cuartos de su campo, el equipo de Daniel Garnero vio y esperó. El "Pincha", en cambio", se hizo de la pelota y fue, no tan agresivamente, pero fue.
El arma principal de la formación de Leo Astrada fue la diagonal de sus volantes externos, Diego Galván por derecha y Leandro Benítez por izquierda, ambos bien asistidos por Juan Sebastián Verón, una vez más el cerebro del equipo albirrojo.
Arsenal, por su parte, buscó por la derecha a través de la sociedad entre Sebastián Carrera y Alejandro Gómez. Y la búsqueda obvia de la cabeza colorada de Facundo Sava. No mucho más. Poco para un equipo que necesitaba levantar una desventaja.
Para el segundo tiempo, Arsenal se despojó de su cautela inicial y se animó a atacar, lo que le permitió a Estudiantes tener más espacios y una defensa no tan cerrada delante suyo: la marca local fue más permeable que antes.
A los siete minutos, Casteglione cabeceó un gran centro del "Papu" Gómez, que Andujar sacó pegado al palo izquierdo. Fue la primera acción clara de gol a favor del "Arse" en todo el partido.
Con el correr de los minutos Estudiantes se replegó excesivamente y muy temprano, dejando todo en manos de Arsenal, que fue a buscar el resultado. Demasiado riesgo tomó el "pincha" ya que su ventaja era mínima, pues un gol de Arsenal lo dejaba a fuera.
Los últimos 20 minutos fueron de un creciente sufrimiento para la visita, que apostaba a Boselli y su olfato de gol, pero el ex Boca vivía en off-side. A once del final se fue expulsado Salgueiro y el cielo de Estudiantes se nubló aún más. Pero el desorden y la desesperación de Arsenal dejaron el marcador en cero y la clasificación "pincha" fue una realidad inmodificable, y con el "Arse" eliminado, la Copa Sudamericana tendrá un nuevo campeón.