NUEVA YORK (dpa) - Si los hermanos Coen echaron mano de los rostros más atractivos de Hollywood, George Clooney y Brad Pitt, como gancho para su disparatada comedia de la CIA "Burn after reading", Ridley Scott sigue sus pasos con su nueva película "Body of lies", que se estrenará el 10 de octubre en los Estados Unidos.
En esta ocasión, el famoso realizador de clásicos como "Alien, el octavo pasajero", "Blade Runner" o la más reciente "American Gangster", junta en la misma producción a los también atractivos y famosos Leonardo Di Caprio y Russell Crowe en un thriller sobre la CIA y su lucha contra el terrorismo.
Scott confía de nuevo en Crowe con quien mantiene una larga relación profesional. El realizador británico, que asegura que el actor neocelandés tiene "un talento especial", trabajó con Crowe en "Gladiador" que le dio el Oscar al mejor actor, "American Gangster" y la comedia romántica "Un buen año".
Además, ambos trabajan en el proyecto sobre la nueva película de Robin Hood, en la que Crowe interpretará dos personajes, el del legendario príncipe de los ladrones y el del malvado, el sheriff de Nottingham.
En "Body of lies", Crowe encarna el papel de un agente burócrata y veterano, Ed Hoffman, quien hace la vida imposible a un colega, el idealista Roger Ferris, a quien da vida Leonardo Di Caprio, y que tiene como misión una célula terrorista de Oriente Medio. Para este papel, Criwe tuvo que engordar treinta kilos, por lo que contó, desayunaba con hamburguesas.
Di Caprio, en cambio, es la primera vez que se pone bajo la dirección de Ridley Scott. Precisamente, introducirse en el binomio Russell-Scott no fue fácil para el protagonista de la película más taquillera de la historia, "Titanic".
En una reciente entrevista con el "Los Angeles Times", el joven actor comentaba que le
llevó semanas acostumbrarse: "Russell y Scott están acostumbrados a trabajar juntos. Sólo emplean unas cuantas palabras y luego, '¡Bum, bum, bum! Eliminemos toda esa secuencia. ¿Me entiendes? Bien. ¿Estás de acuerdo? Genial. Vamos a grabar en diez minutos'".
En "Body of lies", Scott ha confiado en Russell y Di Caprio -que define como "los dos mejores actores de Hollywood"- para dar el golpe en taquilla con esta película basada en la novela del columnista del "Washington Post" David Ignatius, titulada también "Body of lies".
La película, que expone cómo Estados Unidos perdió el rumbo en Oriente Medio, es considerada la producción más crítica sobre la política exterior estadounidense hecha por un gran estudio (en este caso la Warner Bros.) durante el segundo mandato de Bush.
Con este film, espectacular y con escena incluida de tortura a un sospechoso con un bate, Scott busca dar a conocer algunas duras verdades de Estados Unidos y, también, como dijo recientemente, luchar por el Oscar, al cual ya fue nominado tres veces (por "Thelma y Louise", "Gladiator" y "Black Hawk Down").