El titular de la Federación Agraria Argentina (FAA), Eduardo Buzzi, aseguró que la protesta "no va a tener impacto en los consumidores", porque "hay carnes para consumir un mes", y aseveró que "esto tiene que ver con montar un reclamo que sea un llamado de atención, no pretende afectar la economía".

Buzzi comentó que pese al paro, no buscan volver a los escenarios de corte.  "Vamos a protestar, pero no jorobando a la sociedad que transita por las rutas, salvo que haya un escenario de provocación".

En diálogo con las radios Mitre y América, aclaró que "lo que no está en nuestras manos es la reacción de la gente cuando hay una provocación". "La gente está dispuesta a estar a los costados, con panfletos, controlando granos, pero de ninguna manera cortando rutas, por la conciencia de no confrontar con la sociedad", prosiguió.

El paro del campo fue anunciado ayer por la mesa de enlace que anunció un cese de comercialización de granos y de ganado vacuno de pie con destino a exportación que regirá desde el viernes 3 de octubre hasta el miércoles 8, con el objetivo de volver a presionar al Gobierno nacional para que establezca políticas agropecuarias que solucionen los problemas del sector.

"No se encontró el espacio político ni el margen para trabajar", justificó el flamante presidente de la Sociedad Rural Argentina, Hugo Biolcati, encargado de realizar el anuncio del nuevo paro que sólo exceptuará a los productos perecederos y "a la hacienda proveniente de zonas afectadas por la sequía". Ratificó además que no se cortarán rutas.

Al explicar las razones por las que vuelven a la protesta, Biolcati indicó que la situación del sector ha empeorado desde marzo por ``el incremento de los costos de producción ligado al incremento del petróleo, la caída de los precios internacionales... la sequía que ha asolado al país''.