SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Una mujer de 42 años murió trágicamente al incendiarse la vivienda de madera que habitaba y quedar aislada en su dormitorio. Su pareja y los hombres que lo acompañaban lograron salir de la casa casi ilesos, pero no atinaron a rescatar a la víctima, cuyos gritos desesperados despertaron al vecindario.
El lamentable episodio se inició cerca de la 1:20 de ayer en Sáenz Peña 2132, en el barrio Las Mutisias, y pese a que los vecinos llamaron a los bomberos apenas comenzaron a advertir las llamas los voluntarios llegaron cuando el incendio estaba declarado y comenzaba a propagarse hacia las construcciones aledañas.
A esa hora Alicia Lefiñanco descansaba en su habitación, mientras su pareja, Luis Paredes, se hallaba junto a varias personas en otra dependencia de la vivienda. De acuerdo a especulaciones de las autoridades y de los vecinos, el fuego o el calor que desprendía una salamandra habría tomado contacto con un colchón o elementos de material plástico, y mientras los contertulios lograron salir en forma apresurada, ilesos, salvo Paredes, que sufrió quemaduras leves, la mujer quedó aislada en el dormitorio.
Sus gritos desesperados fueron los que despertaron a los vecinos, pero a medida que las llamas abrasaban la casa, sus lamentos se fueron apagando.
Los bomberos evitaron que el fuego se propagara a una vivienda vecina, pero no lograron impedir que se quemara un galpón, y que pereciera el perro galgo que tenía allí su casilla y se habría obstinado en quedarse, pese a que su propietario aseguró que lo había liberado antes de que las llamas destruyeran el galpón.
Cuando los bomberos comenzaron a aplacar las llamas quedaron al descubierto los restos calcinados de la mujer, todavía recostada en su cama, y los vecinos le hacían cargos a su pareja, por no haberse arriesgado a salvarla. "Mi marido quiso echar la puerta abajo para entrar, pero salió una bocanada de fuego y tuvo que retroceder", explicó la vecina Susana Oses, quien recordó haberle pedido a Paredes "que hiciera algo".
La propietaria del predio y prima de Alicia Lefiñanco, Silvia, comentó que "les dejé que construyeran su casilla en mi terreno porque antes otro incendio los había dejado sin casa".
La consternación de los vecinos era absoluta ayer a la mañana en el barrio Las Mutisias, donde si bien los incendios son frecuentes, hace muchos años que no se registra una víctima fatal.
En favor de los bomberos vale aclarar que el incendio se produjo en el sector más alto de la ciudad, donde las calles son prácticamente intransitables y el acceso al lugar muy dificultoso.
