A casi diez kilómetros de Belisle, por la Ruta 22, yendo a Darwin y rumbo al Alto Valle, hay un pronunciado descalce entre la traza y la banquina. Las notorias zanjas se destacan a lo largo del kilómetro 1.019 y es una postal del pésimo estado de la importante vía. Algo similar ocurre en la Ruta 250, en el sector del puente donde aún no terminaron de arreglar las banquinas. La excepción es el tramo de la '22' , en su paso por Belisle donde maquinaria vial repara los laterales de ambos márgenes para tranquilidad de los conductores. |