CIPOLLETTI (AC).-"Venían a esquiar a Bariloche", contó aún conmocionado ayer por la tarde el propietario de Embotelladora Comahue, Néstor García, quien mantiene una relación comercial desde hace años con el marido de la mujer que falleció en el terrible accidente que ocurrió en la mañana en Roca.

García estaba en Buenos Aires cuando sucedió el hecho y viajó en el mismo avión y sentado al lado del empresario, Roberto Linchtenberg, en horas de la tarde. Hasta entonces el hombre sólo sabía del deceso de su mujer; no que también había perdido la vida uno de sus hijos. La noticia causó conmoción en la embotelladora que tiene base en Cipolletti porque los Linchtenberg son proveedores desde hace años. García dijo que el hombre es fabricante de mesas, sillas y sombrillas, en Buenos Aires.

"Siempre venían a esquiar a Bariloche la señora y los hijos", relató el cipoleño, quien al llegar a la región le pidió al gerente de su empresa que acompañara al empresario a Roca.