NEUQUÉN (AN).- Un incendio de pastizales afectó una vivienda y terminó consumiendo una cochera con un vehículo en su interior que quedó incinerado. Las llamas, además, generaron daños parciales en un quincho donde vivía una pareja que en ese momento no se encontraba. El municipio envió un solo camión con agua debido a que por medidas de fuerza del sindicato, el resto quedaron dentro del depósito municipal.
El fuego comenzó alrededor de las 9:30 de ayer en un terreno lindante a la vivienda afectada que se ubica en Avenida Olascoaga al 1.700 del barrio Río Grande.
Las lenguas de fuego consumieron un pastizal y producto de la acción del viento se cruzaron a la propiedad lindante, donde afectaron una cochera en la que se encontraba estacionando un Volkswagen Senda que terminó totalmente destruido.
A su vez las llamas alcanzaron un quincho que posee una habitación, un baño y una pequeña cocina comedor que utilizaba una joven pareja que al momento del incendio se encontraba trabajando por lo que sólo hubo que lamentar pérdidas materiales parciales.
En su voraz paso, el fuego casi termina alcanzando la casa principal que se encuentra a unos 20 metros del quincho por lo que una de las nietas de la propietaria alcanzó a sacar a la mujer por precaución.
"Me di cuenta del incendio gracias a mi cuñado que me avisó que se quemaba el quincho de la casa de mi abuela", contó Ana Ocampos, nieta de la dueña, que vive frente al inmueble damnificado.
Ocampos narró que fueron minutos bastantes tensos "porque si bien las llamas no alcanzaron la casa principal, mi abuela estaba adentro por lo que la tuvimos que vestir y sacar rápido. Temíamos que el auto explotara y eso acercara el fuego".
La mujer destacó que su cuñado vio a un par de jóvenes encender el pastizal por lo que suponen que se trataría de un incendio intencional. No obstante, el hombre estuvo dando vueltas en su auto tratando de localizar a los supuestos autores pero no logró dar con ellos.
En el lugar trabajaron dos dotaciones de bomberos del Cuartel Central que lograron controlar el siniestro gracias a la rapidez con la que accionaron.
Los bomberos solicitaron apoyo a la comuna para que enviara camiones con agua pero debido al paro de Sitramune solo uno pudo asistir al lugar; el resto quedó sin poder salir del corralón municipal, por suerte el siniestro no pasó a mayores.
Ahora los peritos de bomberos deberán realizar la remoción de escombros y de restos carbonosos para determinar si el siniestro fue accidental o si hubo intencionalidad alguna.
