La Justicia confirmó la inmunidad del intendente Carlos Soria y ordenó archivar la querella iniciada por el ministro de Gobierno, José Luis Rodríguez, quien fue calificado como "ladrón" por el jefe comunal durante la campaña electoral del 2007.
Sin embargo, la reacción de Soria fue totalmente contraria a la que habitualmente manifiestan quienes quedan liberados de culpa y cargo en un proceso penal: ayer estaba molesto y anticipó que insistirá para que la causa se mantenga activa a pesar del fallo de la jueza Laura Pérez.
La postura del titular del Ejecutivo roquense puede entenderse al recordar el escrito que presentó en su defensa, luego de ser querellado por Rodríguez. Además de ampararse en sus fueros -justificando la decisión en la nula confianza que le merece el Poder Judicial rionegrino-
Soria planteó una serie de denuncias, que motivaron incluso la apertura de causas paralelas para investigar la posible comisión de delitos por parte de funcionarios del gobierno provincial.
"No quiero que todo quede en la nada. A mí no me hace falta el fallo de un juez para saber que puedo decir las cosas que dije, pero quiero que avance la causa con las denuncias. Quiero doblar la apuesta y comprobar que son unos ladrones y cobardes", sostuvo el mandatario ante "Río Negro".
En este sentido, adelantó que exigirá que la causa se abra a prueba para demostrar que dijo la verdad. "Voy a insistir ante el fiscal todos los días o voy a pedir que lo echen", indicó en relación a Miguel Fernández Jahde, responsable de uno de los expedientes.
Rodríguez fue a la Justicia a fines del año pasado, entendiendo que Soria incurrió en el delito de injurias durante la campaña para los comicios locales.
El actual ministro de Gobierno reclamó el desafuero del jefe comunal, considerando que al momento de llamarlo "ladrón" no estaba hablando como intendente sino como candidato.
Después de merituar las pruebas y argumentos presentados por las partes, la jueza Pérez declaró esta semana la nulidad de todo lo actuado y ordenó archivar la causa.
De todas maneras, el fallo deja abierta una ventana para avanzar en los expedientes paralelos, porque indica que "hasta tanto quede firme la sentencia, suspéndase el plazo para diligenciar y producir la prueba admitida a las partes". Esto es lo que intentará aprovechar Soria, para evitar que se diluyan sus denuncias.
En su escrito presentado el 20 de junio, el intendente mencionó cuatro casos puntuales para ubicar a Rodríguez dentro del lote de funcionarios radicales que "desde hace décadas nos llevan a la ruina y la desesperanza". Habló de deudas de impuestos que tenía el propio ministro, del no cobro de una acreencia de 1,2 millones de pesos a Catedral Alta Patagonia SA, de la quintuplicación de la deuda provincial mientras Rodríguez fue titular de Economía y de su participación activa en "el mayor fraude de la historia institucional de Río Negro": el caso Cedepre.
Y sobre éste último punto, el mandatario mencionó ayer que en las próximas horas podrían confirmarse importantes novedades. Se trata de una información -que a juicio de Soria proviene de una fuente confiable- relacionada con una operación bancaria realizada en Buenos Aires a las 7.41 del 3 de junio de 1997 en una cuenta a nombre de "Jorge Acebedo y otros". El registro de la entidad hablaría de un movimiento de 24.146.405,89 dólares y desde el PJ intentan saber por estas horas si tuvo que ver con el bono Cedepre. (Redacción Central)