ALLEN (AA).- Un grupo de jóvenes alemanes trabajan con mucho esfuerzo en la ampliación de un hogar de ancianos de Allen. Lo hacen de manera voluntaria. Son universitarios que, a través del gobierno alemán y la iglesia luterana, llegaron al país para brindar una ayuda solidaria.

Diez estudiantes germanos arribaron hace unos días a la región para colaborar con la ampliación de las instalaciones del hogar de ancianos "Pohlmann Trabandt", ubicado en una chacra a la vera de la ruta 22 en Allen.

Los jóvenes, hombres y mujeres, trabajan por igual. Cuando llegaron, la obra solo tenía concluida la carpeta de la ampliación; hoy ya levantaron las paredes y piensan llegar hasta la etapa del encofrado.

"Este proyecto, ideado por el gobierno alemán y la iglesia luterana, consiste en enviar cada año 40 mil jóvenes a distintos países de cuatro continentes. Es muy interesante porque de esta manera invierten en el futuro del país ya que los chicos que viajan y que conocen otras situaciones en el mundo, vuelven con otra experiencia y otra perspectiva de la vida" indicó el pastor de la iglesia luterana en Allen, Reiner Kalmbach.

La iglesia luterana de Allen participa en ese programa desde hace ya una década. Todos los años llegan desde Alemania dos jóvenes como voluntarios a desarrollar distintas tareas en el marco de un intercambio cultural y de trabajo solidario. En el 2009 serán los jóvenes allenses que integran la comunidad luterana quienes viajen a Alemania por tres semanas.

Con la ampliación del hogar "Pohlmann Trabandt" la institución podrá albergar a siete abuelos más. "El hogar está abierto a todo el mundo. Al principio estaba pensado para abuelos sin problemas motrices pero con el tiempo las exigencias nos fueron llevando a crear un ambiente destinado también a aquellos que necesitan cuidados permanentes" dijo Kalmbach.