VIEDMA (AV)- Los centros periféricos de salud de esta ciudad están teniendo graves problemas en su funcionamiento, de acuerdo a un informe oficial.

Los baños se usan como depósitos ya que los lugares para tal fin, en la mayoría de los casos, están a medio terminar.

Los recursos humanos resultan insuficientes principalmente en el área de enfermería y, el sector administrativo, en la mayoría de los casos, lo atiende una sola persona que está bajo programa de empleo denominado Programa de Trabajo y Capacitación (Tyc).

También existe la necesidad de ampliar la capacidad edilicia ya que la mayoría de estos centros se construyeron hace mucho tiempo y es de notorio conocimiento que la ciudad sufrió un fuerte aumento demográfico en los últimos años; cita una evaluación entregada por el defensor adjunto del Pueblo, Ignacio Gandolfi, a la ministra de Salud, Cristina Uría.

El relevamiento puso como ejemplo que el centro sanitario del barrio Sargento Cabral se atiende a dos complejos habitacionales de casi 7.000 personas. Según expresó una de las agentes sanitarias que presta servicios desde hace más de 20 años, esa sala fue diseñada y construida para atender una demanda menor derivada de los barrios aledaños (con anterioridad a la construcción del barrio Ceferino), que principalmente estaba integrada por trabajadores de clase media. Con la construcción de este complejo habitacional y al ser éste un barrio con una población con muchas carencias, el centro "quedó chico", no sólo desde el punto de vista edilicio sino ante la falta de recurso humano. Para atender la demanda, el centro tendría que contar con cinco agentes sanitarios y actualmente son dos. Ello implica, según informó, que sólo puedan realizar urgencias. Asimismo, cuenta con dos enfermeras (una de ellas en uso de licencia por enfermedad). Hay tres médicos generalistas, de los cuales dos hacen guardia en el hospital, lo que implica que una vez terminada este tipo de atención se trasladen al periférico.

Una ginecóloga se hace presente una vez por semana, que centra su atención en la atención prioritaria de mujeres mayores de 40 años y sólo con un cupo limitado (hasta 15 turnos). Esta profesional viene de atender el Centro Periférico del barrio IPPV (no tiene dedicación exclusiva con un centro). Los trabajadores manifestaron la importancia de afectarla totalmente a dicha salita.

En este centro se atiende un promedio de 60 consultas médicas por día, sin computar las prácticas en el sector vacunación o enfermería.

El especialista en pediatría atiende los días viernes, pero únicamente brinda consultas por demandas generadas desde el hospital, es decir que no toma en cuenta turnos a demanda del centro periférico.

Los trabajadores informaron la necesidad de contar con una empleada administrativa, ya que la encargada dejó de pertenecer al centro.