MARIANO MORENO (AZ).- La decisión del municipio de cerrar un comedor escolar por no contar con una partida mensual de 2.500 pesos para hacer frente a la adquisición de víveres despertó la indignación de los padres de los alumnos.
El emprendimiento, instalado en Zapala para dar respuestas a los adolescentes marianenses que cursan allí sus estudios secundarios, era apoyado por el gobierno comunal de Edgardo Sapag quien aportaba el espacio físico y el personal necesario.
"Nos enteramos de esta situación por la coordinadora quien nos informó que ante la imposibilidad de comprar alimentos por parte del Ejecutivo de Mariano Moreno se cerraba el comedor", expresó Graciela Rodríguez, una de las madres. La mujer sostuvo que no pudieron ubicar al intendente para exigir respuestas.
Este tema tuvo un acalorado tratamiento en el Concejo Deliberante donde la oposición disparó duras críticas contra la administración del titular del Ejecutivo, Juan Carlos Valenzuela.
"Nosotros no tenemos porqué salir a tapar los agujeros del municipio y es el intendente quien tiene que hacerse cargo del compromiso que asumió con estos sesenta chicos", enfatizó el edil Marcelo Araneda, del bloque de Recrear.
Además, propuso que se reasignen recursos del presupuesto del Concejo para garantizar el funcionamiento del centro.
"El Ejecutivo está obligado a transparentar el destino de los cuentas ya que todavía no tenemos información sobre los recursos y tampoco podemos afirmar si la emergencia decretada es razonable o no", señaló Américo Barros, de Recrear.
El concejal ironizó sobre la problemática financiera de la comuna al advertir que "encontramos gastos por útiles y muebles del orden de los $ 24.000 pesos y por 2.500 estamos cerrando un comedor".
Otro legislador de la oposición, Eduardo Villagrán (Concertación) apuntó directamente contra Valenzuela a quien responsabilizó "por la situación que atraviesan los chicos".