Abogados y representantes de bonistas del exterior que no entraron al canje se mostraron ayer cautelosos frente al anuncio del gobierno de analizar propuestas para reabrir el canje de deuda y aseguraron que primero "hay que ver en detalle de qué se trata" la oferta que hará la Argentina.

En tanto, en la city porteña, las acciones líderes y los bonos domésticos reaccionaron con ganancias al anuncio. Sobre el cierre, y ante la falta de precisiones, la suba perdió fuerza.

El índice Merval, que registra el comportamiento de las principales acciones, finalizó con un alza de 1,67 por ciento hasta 1.690,45 puntos en la Bolsa local, que negoció limitados 77 millones de pesos en acciones, con 51 papeles en alza, 18 en baja y 6 sin cambio.

En Nueva York, la presidenta Cristina Kirchner anunció que el Gobierno tiene en estudio tres propuestas elaboradas por bancos internacionales vinculadas con los tenedores de bonos que no aceptaron el canje y que tienen títulos por 30.000 millones de dólares.

Al respecto, el italiano Nicola Stock, presidente de la Task Force Argentina adelantó que si la propuesta es inferior a efectuada ya en el canje de 2005 "sería difícil dar una respuesta positiva". Esa entidad representa a casi 190 mil bonistas italianos -muchos de ellos jubilados- que tienen bonos en default por 4.400 millones.

Más allá de las dudas y advertencias, Stock admitió que "hay que ver en detalle de qué se trata, quisiera saber qué hay de nuevo, pero por lo que he oído estaríamos frente a una propuesta del banco Barklays que sería inferior a la oferta realizada durante el canje de 2005"

Tulio Zembo, titular en la Argentina de la Asociación de Consumidores Bancarios de Italia, advirtió que quienes ya esperaron "cinco años no tienen apuro" en esperar una resolución judicial favorable. (DPA y DyN)