ALLEN (AA).- Los vecinos del barrio Acceso Aeroclub de Allen sufrieron un nuevo atropello en su lucha por obtener la posesión de las tierras que habitan desde hace varios años. Esta vez manos anónimas derribaron un cerco perimetral que demarca una gran parcela en vías de expropiación, justo en el sector donde viven más de 30 familias.

María Colipe, conocida como "Maruca" en el barrio Acceso Aeroclub, es quien tomó la posta del reclamo que, junto a un grupo de vecinos, lleva adelante para que se los reconozca como propietarios de las tierras situadas en la barda Norte de Allen. Algunas de las personas que viven allí llevan más de 50 años en el lugar, donde también funciona un comedor que brinda contención a niños y ancianos.

Hace una década los vecinos del barrio iniciaron distintas acciones para lograr la propiedad de las tierras que habitan. Se enfrentaron una y otra vez con un empresario minero que es el dueño de los terrenos. El conflicto por las tierras de la barda Norte fue encrudeciéndose con el paso

del tiempo, inclusive hasta llegar a puntos de extrema violencia entre las partes. Durante la gestión pasada se iniciaron los trámites para expropiar una gran parcela de tierra que incluye al barrio, pero aun faltan completar algunos pasos legales para que esas tierras pasen a ser propiedad del municipio.

"Cuando comenzó la expropiación, el ex intendente Sánchez nos sugirió que hagamos un cerco para evitar conflictos con el dueño de las tierras lindantes, pero hoy nos encontramos con que alguien volteó los alambres y postes que colocamos en octubre del año pasado", señaló Colipe.

Del otro lado del cerco están las tierras de un empresario minero que también se dedica a la actividad ladrillera. En ese sector hay una importante cantidad de hornos de ladrillos en donde trabajan decenas de bolivianos.

"Nosotros no queremos más conflictos, sólo pedimos que las autoridades agilicen la expropiación y nos dejen vivir tranquilos. Todavía, y a pesar de que en el barrio hay pobladores que llevan más de cincuenta años viviendo acá, no tenemos los servicios básicos", resaltó Colipe mientras recorría junto a un numeroso grupo de vecinos los daños en el cerco.